
IAG aseguró en la presentación de resultados trimestrales que no abonaría dividendos en 2023 y se centraría en ganar rentabilidad, tras anunciar unas cifras que batieron las previsiones. Sin duda, el negocio de IAG se beneficia de la recuperación del turismo. De hecho, IAG está ya entre las diez empresas europeas a las que los analistas mejoran en mayor proporción su previsión de ganancias en este ejercicio.
Unas buenas perspectivas que convierten en factible la predicción de los expertos, que apuntan a que el grupo al que pertenece Iberia y Vueling, entre otras, retome en 2024 su retribución al accionista y ofrezca una rentabilidad del 2,6% en sus pagos en 2025. Un vaticinio argumentado en la solidez del negocio que solo una gran subida del precio del crudo pondría en duda.