¡Menudo año llevamos en bolsa! ¡Y en renta fija, peor aún si cabe! La inflación alta y persistente, la subida de tipos de interés y la amenaza de una recesión a nivel global para 2023 atiza a todos los activos ¡ninguno se libra! Las caídas para los principales índices de bolsa son de doble dígito: el Euro Stoxx cae en el año un 17%,el Nasdaq casi un 30% y solo aguantan la bolsa de Londres y también la de Brasil aupada por la buena marcha del real. El descenso para la renta fija ronda el 10% ¡renta fija que siempre ha sido sinónimo de protección del capital y de ahorro tranquilo! Sólo aportan rentabilidad a las carteras temáticas relacionadas con las materias primas y la energía, y algún alternativo o fondo de retorno absoluto. ¡Poca cosa!
Este 2022 sufren los ahorradores más audaces -aquellos que suelen tener más exposición a renta variable- y también los más conservadores que con su inversión en renta fija persiguen preservar capital. ¡No se escapa nadie!
¿Paramos nuestro ahorro y hacemos un break? Ahora que la bolsa y la renta fija caen, ¿sería de locos meter más dinero en estos activos? Regla número uno de la inversión: no haga market timing, es decir, no intente buscar el momento adecuado para comprar o para vender ¡la batalla la perderá sí o sí! Siga con su ahorro periódico, constante y con su visión de largo plazo. Para mitigar el riesgo y reducir la volatilidad, la mejor receta es la diversificación añadida a plazos largos y ahorro recurrente. Si además le añade un asesoramiento profesional y una gestión de activos profesional, momentos como éste -de alta inestabilidad, baja visibilidad y elevada incertidumbre- pueden convertirse en idóneos para comprar calidad a valoraciones más ajustadas.
No hay activos sin riesgo. La liquidez tampoco es una opción. Tenemos los españoles metidos en depósitos y cuentas corrientes más de 900.000 millones de euros ¡un horror! Rentan menos del 1% y con una inflación que supera el 8%, ¡eche cuentas! Sí o sí, su ahorro pierde la batalla contra la inflación sin mostrar resistencia ¡un horror!
Lo que está claro es que hay que ahorrar. Para mantener nuestro nivel de vida tenemos que complementar nuestra pensión de jubilación con la hucha que hayamos ido creando a lo largo de los últimos años. Habrá años buenos. Los habrá también malos. Pero la historia nos enseña que funciona el largo plazo, la diversificación y que, tras fuertes caídas en bolsa, llegan años de bonanza. No pierda los nervios, no se deje llevar por las emociones y ahorre. Día a día, y desde el minuto cero.
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