Valencia
La apuesta por la fabricación de coches eléctricos del Grupo Volkswagen en España le obligará a incorporar nuevos proveedores para asumir los 8.000 millones de euros en compras anuales que supondrán los nuevos modelos electrificados y su gigafactoría de celdas de baterías en Sagunto (Valencia).
Un volumen de contratación de componentes y servicios que, tanto para las plantas de Martorell y Pamplona, como para la futura de fábrica de baterías, se canalizará a través de Seat, según explicó ayer en Valencia el vicepresidente de compras de la filial española, Alfonso Sancha.
El ejecutivo de Seat aseguró que además de las nuevas inversiones, como los 3.000 millones de euros previstos en Sagunto y la creación de 3.000 empleos directos, su plan de electrificación también pasa por generar "una cadena de valor fuerte y resiliente para garantizar el suministro de la fabricación" de estos nuevos vehículos. La futura planta, con una capacidad anual de 40 gigavatios hora, tendrá capacidad para suministrar a alrededor de 800.000 vehículos eléctricos al año.
Sancha, que presentó el proyecto de Sagunto ante más de un centenar de empresarios valencianos, señaló que esperan que en septiembre se apruebe de forma provisional el Perte y a finales de ese mismo mes ya cuenten con la luz verde definitiva. Un momento a partir del cual su intención es "acelerar" el proyecto para construir la que será la tercera gigafactoría de celdas del grupo en Europa y la que desde Seat quieren convertir en "la mejor" y "si es posible, la más grande del grupo en Europa".
Primeras licitaciones del Gobierno valenciano
Una de las prioridades del grupo alemán es poder cumplir los plazos previstos y para ello la Generalitat Valenciana, a través de su empresa pública que desarrolla suelo industrial, acaba de sacar a concurso dos de los contratos de actuaciones necesarias para desarrollo de los terrenos donde se ubicará la planta y sus infraestructuras. Se trata de la redacción del proyecto de urbanización del suelo de Parc Sagunt II y del estudio para la plataforma intermodal anexa que incluirá una terminal de carga ferroviaria, según explicó el presidente valenciano Ximo Puig. Ambos contratos suman un presupuesto superior a 4 millones de euros.
La Administración valenciana ha declarado la tramitación de urgencia de estos trabajos previos para cumplir con los apurados plazos que exige el calendario de Volkswagen. Tras abrir un plazo de 15 días para presentarse, los adjudicatarios tendrán 6 meses para llevar a cabo esas actuaciones. El fabricante prevé arrancar las obras de construcción de las instalaciones a inicios de 2023, para poder empezar a fabricar sus celdas en 2026.
Perte con escasa presencia local
El vicepresidente de compras de Seat aseguró en el acto organizado por la patronal autonómica CEV que "queremos ser una empresa valenciana" y que están abiertos a colaborar con las empresas locales. Unas palabras que contrastan con el hecho de que en el Perte presentado con más de 60 empresas y centros de investigación apenas figurasen dos pymes valencianas y ninguno de los centros de referencia de I+D autonómicos. Algo que Sancha achacó a que se había recurrido a empresas con proyectos ya en marcha en electrificación.
Una posibilidad que despertó gran interés no solo entre la industria auxiliar valenciana del automóvil y del metal, sino también entre firmas valencianas de sectores como el químico.