
Una subida de más del 2% y una nueva recomendación de compra junto a un incremento del precio objetivo del 11% por parte de Alantra que deja su potencial alcista medio en el 35%. Son las cifras y las valoraciones de la semana del debut de MásMóvil en el Ibex 35, en la que ha crecido un 1,87% al concluir el viernes en los 19,6 euros por título.
"Estamos contentos con un estreno así", confiesan desde la propia compañía, orgullosos de una de las historias de crecimiento más sorprendentes del mercado español, al haber comenzado su andadura en 2012 en el MAB para después ser la primera cotizada en saltar desde esta plataforma al Mercado Continuo y finalmente alcanzar el índice de referencia, dejando atrás una rentabilidad acumulada del 2.500%, que se traduce en un 56% anualizado, frente al -4% del Ibex 35 en el mismo periodo.
"Creemos que una empresa startup, que en poco más de 10 años llega al índice principal es una buena historia de crecimiento para la cultura de la bolsa española", reconocía Meinrad Spenger, consejero delegado de MásMóvil, en una entrevista concedida a elEconomista antes de que se confirmara el desembarco de la teleco en el Ibex 35.
Consolidado como el cuarto operador, tras las adquisiciones de Yoigo, PepePhone, LlamaYa y Lebara, y habitual del Top 10 por fundamentales -la herramienta de inversión de Ecotrader que selecciona las compañías españolas más atractivas- sigue proyectando "un crecimiento muy por encima del sector", según reconocen desde Banco Sabadell.
El consenso de analistas que sigue su cotización espera que cumpla con los objetivos de su plan estratégico y eleve su ebitda (beneficio bruto de explotación) hasta los 450 millones al cierre del presente ejercicio, desde los 330 millones de 2018, y hasta los 530 millones en 2020.
El principal lastre de la compañía es el elevado endeudamiento que soporta tras la reestructuración financiera y recompra del bono de Providence.