
El acuerdo alcanzado por Rusia y Arabia Saudí para reducir la producción de petróleo es "un primer paso" para pensar que el crudo encuentra su suelo cerca de los 30 dólares el barril.
"Es una primera señal", dicen desde el servicio de Análisis de BBVA, que mostraría "que el petróleo podría haber alcanzado ya un suelo de mercado". Se trata de un factor clave para los mercados de renta variable puesto que de la "visibilidad a largo plazo" que reflejen las materias primas, asegura Ana Munera, directora de Global Equity de la entidad, depende en parte la recuperación de las bolsas.
Los expertos de BBVA estiman un precio objetivo de 10.500 puntos para el Ibex 35 a un año vista, lo que implica, en caso de producirse, que el selectivo nacional podría encarrilar una recuperación cercana al 30% desde los niveles actuales. En el caso del EuroStoxx 50 cifran este nivel óptimo de valoración en los 3.500 puntos.
El círculo vicioso" de la economía
El mercado se ha ido hasta el 50% en términos de posibilidades implícitas de recesión", asegura Antonio Pulido, director de Global Markets Research, pese a que bajo su punto de vista "nos encontramos más bien en una desaceleración de mitad de ciclo que en el comienzo de una recesión".
En este sentido, las bolsas se habrían pasado de frenada en las correcciones actuales dentro de lo que han denominado "el círculo vicioso" de los mercados y que arranca por la tremenda correlación que existe entre la evolución del precio del crudo, con la de las divisas emergentes y sus mercados.
Ahora bien, Munera recuerda que "fuera del sector petrolero, no hay indicadores que lleven a pensar en que estamos como en 2007, de ahí que, con esta información, pensemos que nos encontramos más bien en una desaceleración", básicamente por ratios como el crecimiento de beneficio de las compañías no se ha parado.
"A los niveles de cotización de la semana pasada, tanto en Europa como en España, la bolsa ya descontaba un crecimiento negativo", afirma Munera. Sin embargo, desde BBVA estiman que el los BPA (beneficio por acción) crecerán un 6% en Europa y otro 7%, de media, en el Viejo Continente.
A ello se suma el respaldo de los bancos centrales a la economía. "Nadie piensa que el Banco Central Europeo vaya a subir los tipos de interés el año que viene", reconocen los analistas, que suman esta reflexión a la creencia generalizada sobre el retraso en el incremento del precio del dinero también en Estados Unidos.