
El repunte del precio del petróleo por la escalada de tensión entre Irán e Israel provocó el retorno de los inversores a las principales compañías europeas del sector. Las acciones de Repsol, BP, o Shell entre otras cogen impulso desde los mínimos del año y suben de la mano del barril Brent que ya ronda los 78 dólares. Esto también encarece a las principales petroleras integradas del Viejo Continente y cierra progresivamente la oportunidad de comprar baratas estas compañías respecto a los beneficios que se proyectan para 2025. No obstante, todavía presentan un descuento que en el caso de Repsol se amplía frente a la media histórica de sus comparables hasta alcanzar el 40%.
Que la petrolera integrada del Ibex 35 cotice con descuento frente al conjunto de cotizadas del ramo en la bolsa europea es una constante habitual. Y eso que las propias compañías europeas del sector están más baratas que sus pares de Estados Unidos. En las últimas semanas este descuento aumentó hasta llegar a rozar el 45% en el caso de Repsol en abril de este año, cuando la bolsa global se vio arrastrada por el shock arancelario y el barril Brent llegó a perforar los 60 dólares por unidad. El riesgo de que el comercio global se viera afectado por una guerra arancelaria llevó al mercado a pensar en un desplome del comercio y del crecimiento. Y menos crecimiento es sinónimo de menos demanda de combustible.
Con la caída del precio del petróleo se estrechan los márgenes de refino, la rentabilidad que sacan las petroleras integradas europeas por cada barril de crudo que transforman en diésel o gasolina, y eso deprime el beneficio esperado en compañías como Repsol o TotalEnergies. De ahí que las cotizadas europeas del crudo llegaran a perder un 14% de su valor sobre el parqué hasta los mínimos del 2025. Desde entonces el rebote roza el 30% de media, que Repsol supera con holgura.
El contexto hoy es el contrario. Con el incremento del precio del Brent por miedo a que se interrumpa el suministro de petróleo que llega de Oriente Medio las petroleras vuelven a ser atractivas para los inversores al descontar un mayor beneficio por un incremento del margen de refino. De esta forma, el sector petrolero europeo cotiza con un PER (veces que el beneficio neto está recogido en el precio de la acción) de casi diez veces, según las expectativas del consenso de mercado que recoge FactSet para el 2025. Este múltiplo en el caso de Repsol es de alrededor de 6 veces, por lo que el descuento de la petrolera sobre el sector es ahora del 40%. La media histórica de los últimos cinco años (descontando la mayor parte del 2020 donde el Covid distorsiona los múltiplos sobre beneficios) se sitúa en el 36%.
Con estas expectativas, los expertos están considerando que las petroleras europeas cotizan con más prima que Repsol (en comparación) porque, de media, el PER del sector sube más que el de la compañía del Ibex 35 en las últimas semanas. Así, comprar Repsol hoy sería más barato de lo habitual aún con la incertidumbre del precio del petróleo por el conflicto israelí-iraní y tras los resultados del último trimestre en el sector que no cumplieron, por norma general, con lo esperado por el mercado.
El estratega de Barclays, Stefano Pascale, recoge que en este escenario de estancamiento del conflicto en Oriente Medio (no en uno en el que la guerra fuera total) enfocarse en compañías energéticas baratas como Repsol, TotalEnergies o Eni sería una buena estrategia. No obstante, el experto recomendaría sustituir la compra de acciones por los diferenciales de opciones de compra (call spreads, en inglés). "El petróleo sigue siendo el epicentro del brote del riesgo en Oriente Medio con la agresiva revalorización del petróleo y con la moderada volatilidad de las acciones que no es ajena a patrones históricos", comenta Pascale.
Por otra parte, las mismas expectativas de los expertos consideran que para 2026 Repsol volvería a reflejar un descuento más cercano a lo habitual de los años anteriores, por lo que la ventana para comprar Repsol con más atractivo por beneficio frente a cómo cotiza el sector podría cerrarse en próximas fechas. Uno de los motivos que amplían el descuento en Repsol, más allá del multiplicador de beneficios del conjunto del sector europeo, es que la mayoría de lecturas de los expertos estaban descontando un precio medio del barril Brent para este 2025 entre los 60 y los 65 dólares, un precio sobrepasado con holgura en las dos últimas semanas.
Por cada dólar que sube el Brent, el beneficio por acción de la compañía aumenta un 5% anualizado, según JP Morgan. Estas estimaciones están hechas con un barril Brent en los 65 dólares. Este jueves el precio del crudo europeo está en los 78 dólares (14 dólares por encima), por lo que el beneficio por acción de Repsol podría multiplicarse hasta un 88%. Según las cuentas que realiza el analista de JP Morgan, Matthew Lofting. Por lo pronto, el consenso de mercado que recoge FactSet considera que Repsol cerrará el 2025 con un beneficio por acción de 2,1 euros, significativamente por encima de lo visto en 2024.
Además del precio del petróleo, y por extensión del margen de refino, el precio del gas en Europa es otra variable que afecta a las cuentas de Repsol. También el cruce entre el euro y el dólar es otra métrica que tiene su impacto en la cuenta de resultados de las petroleras europeas. Sin embargo, el mercado no estaría recogiendo un descuento en la compañía solo por sus beneficios. El valor de empresa (enterprise value) de Repsol está cerca de los 25.000 millones de euros, según las estimaciones de Bloomberg. Al cierre del primer trimestre de este ejercicio, la compañía comunicó una deuda neta de 5.800 millones de euros. Así, la resta de estas dos métricas daría un resultado todavía por encima de la capitalización bursátil de la compañía (14.800 millones de euros).

Adicional al rebote del sector europeo desde los mínimos del 2025, los expertos extienden el recorrido por delante de las petroleras europeas en más de un 10% de media. En el caso de Repsol el potencial sería de casi el 13% hasta el precio objetivo de 14,33 euros por acción, según el consenso de mercado. Con los precios a cierre de este jueves solo Equinor estaría cotizando ya por encima de las valoraciones de los expertos.
El otro atractivo de las petroleras, más allá de su descuento en plena subida del precio del petróleo y del potencial que tienen por delante en bolsa según los expertos está la rentabilidad de los dividendos. En un sector cada vez más value, la rentabilidad por dividendo de Repsol roza el 8% para el 2025 a precios actuales sin incluir el rendimiento que darían los programas de recompra de acciones que también es otra forma de distribuir beneficios entre los accionistas.