Madrid
El balance semanal que este viernes al cierre de la sesión arrojará el Ibex 35 es poco alentador para los alcistas. Los descensos acumulados a lo largo de los últimos cinco días, que en las principales referencias del Viejo Continente han dejado pérdidas superiores al 1%, se han agudizado en el caso particular del selectivo español, que acabará cerrando con cesiones por encima del 2% tras perder a comienzos de semana el soporte clave que encontraba en los 10.000 puntos.
Esta cota era la que separaba un contexto conslidativo de uno correctivo, y su perforación deja ahora a corto plazo el primer nivel a vigilar en los 9.750 puntos. "Se trata del objetivo que surge de proyectar la amplitud del movimiento lateral que ha desarrollado el Ibex entre los 10.300 y los 10.000 puntos", explica Joan Cabrero, analista técnico y estratega de Ecotrader.
"Un rebote sin alcanzar si quiera este soporte me temo que podría ser vulnerable y un clásico pull back o vuelta atrás a antiguos soportes, ahora resistencias", advierte el experto, "por lo que para hablar de fortaleza lo mínimo exigible es que el Ibex logre cerrar los dos últimos huecos bajistas que ha abierto, para lo cual debería cerrar sobre los 10.000 y los 10.077 puntos".
Pese a que la primera zona de soporte que aparece ahora en el caso del Ibex 35, está en los 9.750 puntos, la cesión de los 10.000 enteros a comienzos de semana invita a pensar que el contexto correctivo al que se enfrenta el índice ahora le podría llevar a cotizar hasta la zona de los 9.400/9.450 puntos, lo cual supondría un ajuste del 61,80/66% de toda la subida desarrollada en los meses de noviembre y diciembre, así como el alcance de la directriz alcista que surge de unir los mínimos de 2022 y de 2023.
"El alcance de la zona de los 9.400/9.450 puntos lo vería como una nueva oportunidad para comprar bolsa española con una orientación de medio / largo plazo ya que después de esta caída sigo entendiendo que lo más probable es que la tendencia alcista principal se vuelva a imponer", explica Cabrero.
"Este escenario alcista es el que defenderé como el más probable mientras una eventual caída no perfore los mínimos de octubre en los señalados 8.879 puntos, que es donde está el stop y soporte que en ningún caso puede perderse si queremos seguir confiando en un contexto alcista de cara a los próximos meses", insiste el experto mientras comenta que en los 9.400/9.450 puntos la ecuación rentabilidad-riesgo sería más atractiva de la que lo era fechas atrás.