
El conflicto geopolítico que ha surgido en Oriente Medio, con la Guerra entre Israel y Hamás y los últimos ataques de Estados Unidos y Reino Unido a los rebeldes hutíes en Yemen, es una fuente de inestabilidad para los mercados mundiales y están aumentando el temor por la posibilidad de que generen un nuevo incremento de la inflación por el aumento en los costes del transporte y una potencial subida de precios del petróleo. Esto puede tirar por tierra todos los esfuerzos que ha llevado a cabo el Banco Central Europeo (BCE) para cumplir su mandato de estabilidad de precios, si la energía se dispara debido al conflicto. Sin embargo, el BCE parece estar tranquilo en esta ocasión, y esta misma semana ha publicado las conclusiones de un estudio propio que demuestran que el petróleo, en el medio plazo, termina abaratándose cuando se producen shocks geopolíticos.
El estudio del BCE está firmado por tres analistas, Massimo Ferrari, Marie-Sophie Lappe y Denise Röbler, y desentraña la relación entre el desarrollo geopolítico y los shocks que se producen en distintas partes del mundo, con los precios del petróleo. ¿Qué ocurre con los precios cuando llegan crisis en distintas partes del globo? Los resultados del estudio del BCE, que recoge la evolución del barril Brent desde que empezó el siglo, deja una conclusión sorprendente: de media, cuando ocurre una crisis geopolítica en cualquier parte del mundo, el petróleo termina abaratándose un trimestre después.
Esta conclusión es música para los oídos del BCE, en un momento en el que las tensiones y la guerra que se ha desatado en Oriente Medio amenazan su objetivo de estabilidad de precios: una inflación en el 2%. Hay que recordar que, en 2021, fue el precio del gas y de la energía en general el que desencadenó el primer repunte inflacionista, lo que convierte a la energía cara en uno de los peores enemigos de los banqueros centrales del Viejo Continente en este momento.
A pesar de todo, el banco central, según ha reconocido Christine Lagarde, su presidenta, está vigilando muy de cerca el desarrollo de los acontecimientos en Oriente Medio y en Ucrania, ya que es consciente del potencial que tienen de generar una crisis, ya sea esta de inflación, o de crecimiento.
El petróleo se repone del impacto inicial
Según el estudio de los analistas del BCE, cuando ocurre un shock geopolítico el precio del petróleo se encarece en un primer momento. El análisis del BCE recoge 9 eventos que han ocurrido desde que comenzó el año 1990: la guerra del Golfo, los ataques terroristas del 11 de septiembre, la invasión de Iraq, el ataque terrorista en Londres, la primavera árabe y la guerra civil en Libia, los ataques terroristas en París, los ataques a la embajada estadounidense en Iraq, la invasión rusa de Ucrania y, por último, la guerra entre Israel y Hamás.
El impacto en los precios del crudo, según el estudio, llega por dos vías: los riesgos para la oferta mundial de la materia prima, y el impacto en la demanda por el daño económico que estos eventos generan. "Los shocks geopolíticos tienen un impacto a través de la actividad, o por los riesgos para la producción de petróleo", indica el informe. Y la conclusión a la que llega el estudio es que, una vez se pasa el impacto inicial, "un shock geopolítico mundial presiona a la baja a los precios del crudo".
Llama la atención que los conflictos geopolíticos en Arabia Saudí son los que han terminado con las bajadas del precio del crudo más fuertes, del entorno del 2%, según el BCE. Por el contrario, los que han tenido el foco en Rusia han generado los repuntes más fuertes un trimestre después de producirse, de casi el 2%, en este caso.

El impacto inicial en el Brent por los conflictos que se desencadenan en Venezuela, Rusia, Israel y China son los más fuertes, ya que "los traders esperan que se produzcan disrupciones en la oferta de petróleo del futuro". Sin embargo, los analistas del BCE tienen claro que "las presiones del petróleo por los shocks geopolíticos suelen ser de corta duración, y la elasticidad pasa a ser insignificante después de un trimestre en la mayor parte de países", señalan. Eso sí, el informe concluye destacando la importancia de "identificar la naturaleza de los shocks geopolíticos para poder desentrañar sus efectos en los precios y en la inflación", señala.
El 'Brent' cae un 6,4% desde la guerra
El último conflicto geopolítico que se ha desatado en el mundo, la guerra entre Israel y Hamás, y el impacto que ha tenido en el precio del petróleo encaja con los resultados del estudio del BCE. Cuando dio comienzo el conflicto, el precio del Brent se disparó casi un 10% en las dos semanas posteriores, por el temor a la posibilidad de que la guerra generase una disrupción en la oferta de petróleo. Sin embargo, con el paso de los días las subidas se diluyeron, hasta el punto de que, tres meses después, el Brent cotiza un 6,4% por debajo de los precios en los que cotizaba cuando comenzó el conflicto, pasando de los 84,5 dólares hasta los 49,1 dólares en los que se movía el viernes, a media sesión de Wall Street.
Esta caída, además, se ha producido en medio de un nuevo pacto de recorte de producción por parte de la Organización de Países Exportadores de Petróleo y sus aliados externos, el cártel conocido como OPEP+, que ha ampliado durante todo 2024 el acuerdo que ya estaba vigente el año pasado. Los inversores parecen tener claro que el deterioro de la demanda de petróleo que se espera para este año, en el que el crecimiento económico va a continuar enfriándose, eclipsará cualquier reducción que pueda producirse en la oferta, algo que también encaja con el último estudio del BCE.