
El euríbor sigue su ascenso implacable al son de las subidas de tipos del BCE. Los últimos datos relativos a la media de todo el mes de octubre apuntan a un 4,165%, que sitúa al índice en su punto más alto desde la crisis bancaria de 2008. Sin embargo, con la escalada en el 'precio del dinero' por parte del Banco Central Europeo hasta el 4,5% que parece estar ya concluida, los expertos coinciden en que el encarecimiento podría estar acabado o a las puertas de su final. Eso sí, también advierten de que los altos niveles actuales seguirán durante un periodo prolongado, lo que implica unos mayores costes para las hipotecas variables, las mayoritarias en España.
Joaquín Robles, analista de XTB, explica que todo depende de la inflación pero, si tal y como estiman el BCE, la inflación sigue resistente pero a la baja durante los próximos meses "el euríbor se estabilizará y empezaremos a ver caídas hasta el 4%". El experto remarca que "si los inversores empiezan a descontar el final de las subidas de tipos y ponen el foco en el primer recorte" este descenso podría acelerarse. Sin embargo Robles deja claro que si hay un repunte de la inflación significará instantáneamente un duro castigo para las hipotecas, que verían como el euríbor puede dispararse
El BCE empezó en julio de 2022 uno de los mayores ciclos de la historia de la institución, al incrementar 450 puntos básicos el 'precio del dinero' en tiempo récord, solo 14 meses, y llevar así la tasa de depósito a su nivel más alto en 20 años. En el comunicado de la última subida, en septiembre, la institución deja claro que ya han llegado al punto álgido. "Sobre la base de su evaluación actual, el Consejo de Gobierno considera que los tipos de interés oficiales han alcanzado niveles que, mantenidos durante un período suficientemente largo, contribuirán sustancialmente al retorno oportuno de la inflación al objetivo".
En cualquier caso, este movimiento ha tenido un fuerte impacto en las hipotecas españolas, que según datos de XTB, habría provocado que un producto a 150.000 euros a 24 años haya tenido un aumento de 104 euros al mes en su cuota y 1.248 al año. Esto tendría un especial impacto en España, pues las hipotecas variables supusieron en 2022 cerca del 55% del total, una de las cifras más altas de Europa.
Respecto a la inflación, el elemento clave para un posible resurgir del indicador, esta ha caído con fuerza en Europa desde el 10% en el que se encontraba en noviembre de 2022 hasta el 2,9% actual. Especialmente tras un importante recorte desde el 4,3% en el que se encontraba en septiembre. Según las previsiones del FMI ahora viene una "moderación continua en el IPC de la zona euro" . Eso sí, desde la institución creen que caerá de forma muy leve, pues no se alcanzará el objetivo del 2% hasta 2025 en muchos de los países del Viejo Continente. Desde el propio BCE creen que esta estará sin grandes movimiento por encima del 3% y desde la OCDE apuntan a que terminará el año en el 2,9%.
La reciente caída ha venido en buena medida de un enfriamiento de la economía por la subida de los tipos de interés, pero las últimas caídas han venido más de la mano de la energía. La inflación subyacente (sin energía ni alimentos frescos) ha retrocedido tres décimas hasta el 4,2% en comparación con los 1,4 puntos de caída que vivió el IPC general. En ese sentido, los menores costes energéticos son una de claves para contener los precios y por ello el mundo mira preocupado a Oriente Medio.
"Nosotros creemos que al fin se está estabilizando, pero es muy pronto decir que ha tocado techo, ya se contaba con la decisión del BCE"
El ataque de Hamás a Israel y la posterior escalada bélica en la región ha sido uno de los catalizadores de la última subida del precio del petróleo. Tras un avance hasta los 95 euros el barril, la posterior calma y falta de movimientos ha tranquilizado al barril de referencia europeo, que ha vuelto a los 85 euros. Sin embargo, los expertos advierten de que cualquier incremento de la tensión a medida que vayan avanzando las noticias de la Franja de Gaza podría suponer un repunte de la materia prima que acabe golpeando a la inflación también de la Unión Europea. Así lo explican desde Federated Hermes, cuyo gestor de mercados emergentes, Mohammed Elmi, explica que "Aunque la mayoría de los exportadores de petróleo han empezado a reducir el riesgo de que las exportaciones de petróleo salgan del Estrecho de Ormuz, cualquier escalada con Irán provocaría interrupciones en las exportaciones y una subida sustancial de los precios".
Desde iAhorro coinciden con que podríamos estar ya ante un techo en el euríbor pero con matices. "Nosotros creemos que al fin se está estabilizando, pero es muy pronto decir que ha tocado techo. Este mes de octubre ha ido descontando la decisión del BCE de mantener los tipos y por eso no se ha llegado al 4,2%" explica Laura Martínez, portavoz de la plataforma. En ese sentido, apunta a diciembre como el punto clave para decidir el futuro de las hipotecas. "Es un mes de mucho consumo por la Navidad y la inflación suele aumentar por lo que no es una idea descabellada que el BCE en el último mes del año vuelva a subir los tipos entre 15 y 25 puntos para controlar ese consumo. Si esto fuera así, empujaría al euríbor a ese 4,2%".
El euríbor más alto implica 112 euros más al mes en la cuota
Esto coincide con el análisis de los expertos de Bankinter que creen que el euríbor retrocederá en los próximos 12 meses hasta el 4,1%. Marcando un leve retroceso respecto a las cifras actuales y deteniendo las caídas. Desde Funcas son aún algo más optimistas dejando el indicador para 2024 en el 4,07% mientras que los expertos de Caixabank opina en la misma línea con unas previsiones del 4,08% a 12 meses.
Estefania González, portavoz de Kelisto, explica respecto a una posible bajada del mismo que "no cabe esperar ningún alivio a medio plazo". Eso sí, González explica que sí parece estabilizarse y cree que en 2024 podemos esperar un techo del 4%. Sin embargo, "hay que entender que nos encontramos en un momento de incertidumbre en lo que respecta a las políticas del BCE". A pesar de que los tipos ya se encuentran en máximos de 20 años, la portavoz cree que "Christine Lagarde no cierra la puerta del todo a futuras subidas, aunque pudieran ser leves, dado que cuestiones como la evolución del precio de la energía (entre otros motivos, por el conflicto en Oriente Medio) podrían volver a tensionar los precios en la zona euro".
En caso de unos tipos que se queden como están, según los cálculos de Kelisto, esto supondrá un incremento en el pago de hipotecas variables de más de 112 euros al mes (1.359 euros más al año). Este incremento del 15% respecto a 2022 podría ser el resultado de un BCE que cumpla con los pronósticos, el escenario que actualmente los expertos ven con mejores ojos. En cualquier caso, los hipotecados tendrán que resistir con estos precios más elevados durante un largo camino que se extenderá durante algún tiempo, pues el recorte de tipos parece aún lejano.