
Los mercados europeos arrancan la sesión al alza como previa a la inauguración de Jackson Hole. El Ibex 35 sube en estos primeros instantes un 0,6% mientras que el EuroStoxx 50 recupera los 4.300 puntos tras levantarse un 0,8%. Aunque se espera un mensaje agresivo por parte de la Reserva Federal de Estados Unidos en la reunión de banqueros centrales, la renta variable avanza dando continuidad a la sesión asiática.
El avance de las compañías tecnológicas tanto en China, como en Japón o Corea del Sur fue una de las causas del impulso de la bolsa, motivada por los buenos resultados que presentó Nvidia tras el cierre del mercado del pasado miércoles. De hecho, la acción de la desarrolladora de semiconductores también se disparó más de un 6% en las operaciones aftermarket.
Todo apunta a que el Nasdaq 100 se verá impulsado al alza en esta sesión por las grandes tecnológicas. Pero aunque el rebote avance para el índice tecnológico, no evita el riesgo de caídas. Desde un punto de vista técnico, el asesor de Ecotrader Joan Cabrero recuerda que el actual rebote no sorprende.
"Quiero insistir que mientras los índices de Wall Street no recuperen los altos históricos del 2021 veo a la renta variable estadounidense bastante vulnerable. Dudo que sin alcanzarse esos altos el mercado norteamericano haga un techo sostenible", explicó el experto. A corto plazo, no puede descartarse asistir a una recaída que incluso podría llevar al S&P 500 a buscar la directriz alcista que surge de unir los mínimos de octubre del año pasado con los de marzo del actual.
Si eso sucede, estaríamos ante una nueva oportunidad para volver a comprar bolsa norteamericana, como lo fue la caída del Nasdaq 100 a los 14.700 puntos. Por contra, mientras el principal índice tecnológico no pierda los 10.450 puntos el experto de Ecotrader no es partidario de cerrar posiciones en el Nasdaq.
Las últimas sesiones en el mercado de renta fija se han caracterizado por el volátil movimiento de los precios y rentabilidades de los bonos soberanos. Aún así, las principales referencias para el mercado estuvieron condicionadas por las compras en las horas previas al arranque de Jackson Hole.
El rendimiento del bono estadounidense a diez años cayó más de 10 puntos básicos desde que tocó su máximo desde 2007 esta semana pero espera a las declaraciones de Jerome Powell, presidente de la Reserva Federal, sobre el 4,2%. Mientras, los rendimientos del bono estadounidense a dos años cae por debajo del 5% de retorno.
Misma suerte corre en el mercado europeo con el bund alemán con vencimiento a diez años en el 2,51% y el español en el 5,53%. Además, el repunte generalizado del riesgo visto en la deuda asiática con grado de inversión se redujo en su descenso más pronunciado en nueve meses, según Bloomberg, lo que abarata el coste de asegurar esta deuda contra impagos.
Desde que el mercado contempla la posibilidad de que la Reserva Federal de Estados Unidos posponga a más allá de septiembre la ansiada bajada de tipos de interés, el dólar ha vuelto a establecerse como la divisa dominante del mercado. El euro se sitúa al cambio por debajo de los 1,09 dólares lo que implica un recorte del 3,4% desde su máximo del año, alcanzado a mediados del mes pasado sobre los 1,12 dólares. Así, en lo que va de 2023 el euro retrocede frente a la divisa norteamericana un 1,3%.
No obstante, no ocurre solo con la divisa común de la eurozona. La cesta de las diez grandes referencias del mercado frente al dólar también retrocede frente al billete verde aunque a la larga la libra, el euro o el yen japonés tenderán a recuperar terreno (se espera que la política monetaria de estas regiones sea más restrictiva durante más tiempo que en EEUU).