
No hay duda de que en la sesión de hoy, destaca sobre el resto de cosas la publicación del dato de IPC en EEUU correspondiente al mes de diciembre. De la cifra de inflación que se dé a conocer, dependerá la próxima hoja de ruta de EEUU en lo referente a la evolución del precio del dinero y, por ende, el devenir de los mercados en el corto plazo.
Ante este panorama, y a la espera de conocer finalmente cual es ese dato, la batalla entre alcistas y bajistas ha estado tan igualada que las principales bolsas de Asia se han decantado por cotizar casi planas en la jornada a escasas horas para su cierre. En Europa, pasito a pasito las principales bolsas del continente van eliminando obstáculos y resistencias en su avance hacia los grandes objetivos técnicos que se han planteado para ellos: los 4.400/4.420 puntos en el caso del EuroStoxx 50 y los 9.300 para el Ibex 35.
Si a comienzo de semana fue el selectivo continental el que lograba superar la importante resistencia de los 4.050, ayer el movimiento más reseñable lo protagonizó el Ibex en su versión con dividendos que alcanzó la zona de los 28.250 puntos.
"Se trata de la resistencia horizontal que ha frenado hasta en tres ocasiones las subidas durante el último año y medio y que es el techo del amplio proceso lateral que viene acotando la consolidación de la bolsa española desde hace dos años", destaca Joan Cabrero, analista técnico y estratega de Ecotrader.
"Llegados a este importante entorno resistivo habrá que estar atentos para ver si la presión compradora logra imponerse, algo que sería una enorme señal de fortaleza que abriría la puerta a una vuelta del Ibex con dividendos a sus altos de todos los tiempos en los 29.550 puntos, que alcanzó justo antes del Covid crash y hasta los que todavía hay un margen de subida del 5%".

En lo que se refiere al Ibex 35 tradicional, que también ha alcanzado la resistencia de los 8.800 puntos, una subida de esa envergadura supondría llevar al selectivo a los siguientes niveles resistivos, entre los 9.000 y los 9.300 puntos.
Europa suma un nuevo adepto en su avance a los máximos de 2022
Las últimas subidas en el mercado de renta variable han favorecido también que el EuroStoxx 50 consiga superar los máximos que estableció a mediados de diciembre en los 4.035 puntos y, lo que es más importante, que logre batir la resistencia clave que encuentra en los 4.050 puntos. "Su ruptura, sobre todo si se acaba confirmando a cierre semanal, plantea un contexto más lateral alcista hacia los 4.400/4.420 puntos que bajista en próximos meses", afirma Cabrero quien hace hincapié a que en las últimas horas esto último parece ganar enteros con la superación ayer de resistencias en el DAX 40 de Frankfurt.
Los 4.400/4.420 puntos son los máximos del año pasado y el origen de la última gran corrección bajista, y hasta ellos hay un margen de subida del 8-10%. "Aumentarían las posibilidades de ver un alza hacia esos 4.400/4.420 puntos si supera los 4.160 puntos, que es la recuperación del 78,60% de Fibonacci de toda la caída de los 4.420 a los 4.250 puntos" explica el experto mientras detalla que el alcance de este entorno resistivo podría provocar una nueva consolidación a corto plazo, aunque probablemente ya sería previa a otro segmento al alza hacia esos 4.420 puntos.