El entorno actual obliga a ser exigentes. "Nuestro posicionamiento es más vender con los rallies, que comprar con las caídas", explica Alex Fusté, economista jefe y director de inversiones del Grupo Andbank. Desde esta firma creen que "la economía mundial se dirige hacia una recesión con inflación, y aun cuando esta transición podría ser temporal ha de mantenerse la prudencia, ya que en dicho escenario pocos activos financieros responden bien".
Fusté ha detallado, en un encuentro con medios, las incógnitas aún por resolver en el mercado, que dibujan un 2023 lleno de desafíos. Muchos de ellos pivotan alrededor de la inflación. "La Fed sabe de los riesgos detrás de la inflación: resultados empresariales exagerados, que no son del todo ciertos por los costes operativos contabilizados a precios históricos más bajos, que generan un problema posterior de caja. El riesgo es que ese problema de caja derive en una asistencia masiva de las empresas al mercado de financiación, y genere tensiones que puedan desplazarse al mercado de deuda corporativa", señala el experto. "La Fed debe luchar contra esos problemas ocultos, y creemos que será vigilante más tiempo del que el mercado piensa".
También creen que la idea de que la inflación irá moderándose por simple efecto base, y sin prácticamente dolor, "podría ser un tanto simple e ingenua", describen. Según los cálculos de este grupo, la historia muestra como cada 2 puntos porcentuales de reducción en la inflación en los EUA han necesitado de una recesión que ha originado un deterioro en el desempleo. "La relación es por cada punto porcentual de mejora en la inflación hacen 0,6 puntos de deterioro en paro. Como la inflación general hoy está en el 7,7%, hablaríamos de casi 6 puntos porcentuales de rebaja necesaria. Eso es solo consistente con una recesión que venga acompañada de un empeoramiento en el paro de unos 3,5 a 4 puntos porcentuales (hasta una tasa de desempleo del 7,2%-7,5%)", detallan.
Otro elemento que introduce presión en el mercado es el estrecho vínculo entre energía, ciclo económico y mercados. "A la economía mundial nunca le ha ido bien con precios energéticos estructuralmente altos", indica Fusté, y, "si bien los precios del gas han disminuido recientemente en Europa, aún siguen un 800% por encima del precio medio anterior a 2020". El vínculo muestra que rara vez ha sido rentable invertir en activos financieros cuando la energía estaba cara y tendía al alza. Y la energía aún se encuentra en fase de aceleración.
Prudencia y liquidez
Ante este panorama, el grupo Andbank mantendrá un elevado nivel de efectivo y activos líquidos asimilables en los mandatos discrecionales, y solamente entrarán con determinación en los activos de riesgo cuando los niveles ronden los 3.200 puntos en el S&P y los 390 puntos en el Stoxx 600. En el caso de la bolsa española, un mercado que sobreponderan ligeramente, el nivel de entrada lo sitúan en los 8.097 puntos.
Sobre cómo articular esa exposición al Ibex, Marian Fernández, responsable de macro de Andbank España, apunta tres opciones: la banca doméstica, el sector de las renovables con compañías como Acciona o Solaria; y valores más pequeños no estrictamente Ibex, como pueden ser Prosegur, Miquel y Costas o Grifols.
Hacia una economía más racional
A pesar de los desafíos que plantea 2023, "esperemos que un entorno de tipos de interés positivos nos devuelva la racionalidad en todas las decisiones económicas. Creará un entorno razonable que termina con una dinámica perversa por la que teníamos que incurrir en un desequilibrio para tapar otro", explica Fusté. A más largo plazo, "será el mercado y sus partícipes quienes decidirán los precios de los activos y no de las autoridades monetarias", argumenta. Es el motivo por el que mantenerse en el mercado, siendo exigente, con cash, a la espera de las oportunidades.