
Una misma historia puede ser completamente diferente según la versión que se quiera comprar. Y esto, aplicado al mercado, es la otra cara de la moneda que deja el batacazo que llevan experimentando las bolsas a lo largo del año, que es la de la rentabilidad por dividendo. Las caídas que sufren los diferentes índices elevan este porcentaje en Europa hasta el 3,7%, es decir, casi un punto porcentual más de lo que ofrecía al inicio del año, cuando tocaba el 2,9%. En el caso del Ibex pasa del 4% que ofrecía en enero al 4,3% actual, siendo el índice continental con mayor rentabilidad por dividendo.
Pero las caídas no solo dejan atractivas rentabilidades en las bolsas. El reajuste que se ha producido en el precio de los bonos también ha incrementado las rentabilidades esperadas. Tanto, que la deuda corporativa ya es una fuerte contrincante de la renta variable. Y es que, actualmente, la expectativa de ganancias es del 4,9%, es decir, el doble de rentabilidad que brindaba hace 12 meses, cuando rondaba el 2%, y un entorno que no visitaba desde 2009.
Si cogemos como referencia el índice Barclays Global Aggregate, que incluye toda la deuda global, tanto la privada como la pública, la previsión de rentabilidad es del 2,8%, es decir, un punto porcentual menos que lo que renta el dividendo europeo pero más que lo que lo hacía al inicio del año, cuando tocaba el 1,4%.
El tablero inflacionista en el que se mueven las diferentes economías y el temor de que el endurecimiento de la política monetaria se traduzca en una recesión dejan caídas de dos dígitos en todos los termómetros europeos excepto en la referencia española, que aguanta mejor el chaparrón que sus coetáneos. Sin embargo, como se adelantaba, es también la bolsa patria, junto con la británica (de un 4,3%), la que ofrece una mayor rentabilidad por dividendo entre los principales índices del Viejo Continente.
Así, dentro de los valores que conforman el club de las 35, actualmente hay cinco que ofrecen rentabilidades superiores al 8%, con Merlin Properties en cabeza, con un retorno anual del 11,5% a precios actuales, seguida de Mapfre, con un 9,2%; ACS, con un 8,8%; Enagás, con un retorno del 8,7% y BBVA, con un 8%.
En cuanto al resto de índices europeos, todos han visto cómo crece la rentabilidad por dividendo en lo que va de año. En el caso del Dax alemán, que se deja un 19% en bolsa en este 2022, el retorno incrementa hasta un punto porcentual desde el primer día de enero, ya que pasa del 2,9% al 3,9% actual.
La principal referencia francesa, el Cac 40, también ve un alza de casi un punto en su rentabilidad, con un 3,4% actual. Y la otra referencia del Viejo Continente, el Stoxx 600, ve un crecimiento en su rentabilidad del 0,7 puntos porcentuales y pasa del 3% del inicio del ejercio a los 3,7% actuales.
"En periodos de aumento de la volatilidad de los mercados, lo aburrido es bello. Por eso, muchas de las compañías que reparten dividendos actualmente constituyen atractivas oportunidades de inversión, aunque puedan resultar aburridas", explican desde Capital Group, que añaden que, "de hecho, los inversores están comenzando a reconocer la importancia de la inversión en dividendos. Cuando los mercados cayeron en la primera mitad del año ante el temor por la ralentización del crecimiento y el aumento de la inflación, los inversores dejaron de favorecer a las compañías tecnológicas de rápido crecimiento y elevadas valoraciones para pasar a centrarse en empresas que reparten dividendos con unas valoraciones más reducidas", rematan.
Así las cosas, y abriendo el abanico al otro otro lado del charco, desde Norbolsa desarrollan que"la subida de previsiones de beneficios unida a las caídas bursátiles vividas, han supuesto un significativo derating de las bolsas, con niveles de peres por debajo de sus medias de 20 años y con un diferencial de rentabilidad por dividendo con respecto al bono 10 años [el amerciano] de más de dos puntos porcentuales. Estas valoraciones nos llevan a continuar recomendando renta variable, pero, dada las numerosas incertidumbres actuales, con una exposición más moderada, centrados en valores y sectores de calidad, balances sólidos y atractivos dividendos".
Con mayores retornos
Las automovilísticas Stellantis y BMW son las europeas con la rentabilidad por dividendo más altas, con un 10,2% y un 9,4%. La firma neerlandesa dirigida por Carlos Tavares ya cae más de un 29% en el parqué en lo que va de año. Sin embargo, en la previsión de beneficios de la misma no se ve reflejada esta caída, ya que, pese a estos descensos, la automovilística se compra actualmente a 2,6 veces, siendo también la compañía del EuroStoxx más atractiva por ratio PER (veces que el beneficio se recoge en el precio de la acción). BMW, que se deja un 15% en bolsa en lo que va de año, también ofrece uno de los peres más atractivos, y se compra a 4,7 veces. La italiana Intesa Sanpaolo, seguida del banco más grande de Europa, BPN Paribás, y la alemana BASF complentan la lista, con retornos del 8,9%, 8,7% y 8,5%.
Vuelta a rentabilidades históricas
Ya al inicio del año, cuando el Ibex alcanzó rentabilidades del 4%, supuso tocar retornos históricos si se tiene en cuenta que la plaza española venía de dos años de impasse por la pandemia, cuando muchas compañías dejaron de pagar estas retribuciones debido a las cuantiosas pérdidas registradas. Así, este retorno ha crecido casi un punto y medio desde el 2020, cuando era del 2,9%. Para el año que viene, se prevé que la rentabilidad por dividendo del Ibex siga en el entorno del 4%.