
La compañía neerlandesa batirá otro récord de beneficios este año, según las previsiones, y por sus ganancias se pagan múltiplos inferiores a las 20 veces. La acción ha experimentado una fuerte caída desde enero, pero tiene un potencial del 65%. | Todo sobre el fondo asesorado por elEconomista.es, Tressis Cartera Eco30.
La llamada Ley de Moore expresa que el número de transistores por chip de silicio se duplica cada dos años: una cuestión de densidad. Sin embargo, "el problema de la Ley de Moore en 2022 es que el tamaño de un transistor es ahora tan pequeño que no se puede hacer mucho más para reducirlo", publicaba en febrero el medio especializado Interesting Engineering.
Además, apuntaban, "el coste de los transistores cada vez más pequeños no está disminuyendo como en los años 60" y "cuando el número de transistores se duplica, también lo hace la cantidad de calor que pueden generar", con lo que "el coste de la refrigeración de las grandes salas de servidores es cada vez más insostenible" para las empresas.
Y en todo esto tiene mucho que decir ASM International, compañía neerlandesa que se acaba de incorporar al índice Eco30 y al fondo Tressis Cartera Eco30, asesorado por este periódico. "ASM ofrece una serie de métodos y máquinas complementarias para depositar películas finas de materiales, algo que se está convirtiendo en algo fundamental para fabricar chips avanzados. A medida que se complica el avance de la Ley de Moore, estas máquinas son cada vez más importantes, lo que sitúa a empresas como ASM en una posición competitiva privilegiada", escribían hace unos días en la web de inversión Seeking Alpha.
ASM -no confundir con ASML- ganó 494,7 millones de euros el año pasado, un beneficio neto histórico; y se prevé que revalide ese récord durante los tres próximos años consecutivos, siendo en 2022 de 592 millones, según el consenso de analistas que recoge FactSet.
Lo mismo ocurrió con los ingresos: 1.730 millones de euros en 2021, una cifra sin precedentes, que se elevará a los 2.250 millones en el presente ejercicio y podría rozar los 3.000 millones en 2024.
El inversor debe saber que está ante una empresa con la suficiente generación de efectivo para pagar sus deudas y cuyas acciones reciben una de las recomendaciones de comprar más claras del consenso de mercado, entre las grandes firmas de semiconductores de EEUU y Europa. Además, por sus beneficios de 2022 se pagan múltiplos de 19 veces a precios actuales, que bajarán a 17 veces en 2023.
"ASM International ha mejorado considerablemente su posición en la industria de los semicaps [proveedores de equipamiento para la manufactura de chips] en los últimos dos años. Todos los principales fabricantes de semiconductores de vanguardia comenzaron a utilizar sus herramientas ALD [deposición de capas atómicas] para los procesos de 10nm/7nm/5nm [nanómetros]", explica JP Morgan.
"Domina el mercado de la lógica. Su posición en el mercado de las memorias está mejorando. En particular, como la DRAM utiliza un escalado más similar al de la lógica, utilizará más herramientas ALD de oblea única, lo que beneficiará a ASMI", añaden desde el banco estadounidense. La acción cotiza en la zona de los 437 euros, pierde casi un 40% en el año y tiene un potencial del 65%.