
La compañía francesa recibe el mayor respaldo de los analistas en casi diez años y todo apunta a que registrará un beneficio récord en 2021 y también en 2022. Es una de las últimas incorporaciones al fondo Tressis Cartera Eco30 de elEconomista.
Igual que Capgemini, Engie o Sanofi compran activos en los Estados Unidos, Rexel también lo hace, como anunció en noviembre tras la adquisición de Mayer, un distribuidor de productos eléctricos, puesto que el país norteamericano es el mayor mercado del mundo para este tipo de suministros (de EEUU procede casi un tercio de los ingresos de la empresa gala). No se trata de una compra aislada, sino de una estrategia anunciada en febrero de 2021 por la cual Rexel reanudaría las adquisiciones complementarias para reforzar su posición de liderazgo en mercados clave.
"Con unos sólidos resultados en el tercer trimestre, Rexel creció por encima de sus niveles anteriores a la crisis por tercer trimestre consecutivo, demostrando su capacidad para captar la demanda en los mercados de la renovación, la electrificación y la transición energética", dijo Guillaume Texier, consejero delegado de la compañía francesa, en la presentación de los resultados de julio a septiembre.
Habrá que esperar al 11 de febrero para conocer las cuentas de 2021, pero hace unos días la dirección adelantó que "la actividad comercial fue más fuerte de lo previsto en el cuarto trimestre y los esfuerzos de contención de costes beneficiaron a los márgenes del grupo de distribución de energía", según publicó Les Echos. "Rexel terminó el año 2021 con una explosión, se cumplieron todos los objetivos", añadió el diario económico.
"Para 2022, prevemos que nuestros planes de acción nos permitirán mejorar aún más el margen ebita ajustado de 2021, del 5,8% (ajustado por efectos no recurrentes), y situarnos por encima de nuestra ambición del 6% a medio plazo, por delante de nuestra hoja de ruta para 2023", comunicaron desde Rexel el miércoles.

De hecho, 2021 va en camino de convertirse en el más rentable en la historia de la compañía gala, con un beneficio neto de 508,5 millones de euros, según el consenso de analistas que recoge FactSet. Asimismo, la cifra de ventas superaría el récord anterior de 2019 y ascendería a los 14.452 millones, incrementándose otro 16% hasta 2024.
Rexel está en un momento dulce. El consejo de comprar que recibe del consenso de mercado es su mejor nivel de recomendación desde 2013, y en bolsa sube casi un 18% en lo que va de ejercicio -es el valor del fondo Tressis Cartera Eco30 que mejor se comporta en el parqué desde el inicio del año-. A eso se añade una ratio precio/beneficios de 11,6 veces para 2022 y de 10,8 veces en 2023 (una cifra nada cara).
"Rexel está bien posicionada para beneficiarse del aumento del contenido de productos eléctricos en los edificios y de los esfuerzos de descarbonización deseados o legislados en el futuro. El aumento de la complejidad para sus clientes es un beneficio para Rexel", publicaba el equipo de análisis de J.P.Morgan esta misma semana. Pero señalaban como riesgos que "la capacidad de diferenciación es menor que en el sector de los bienes de equipo en general".