La aerolínea irlandesa Ryanair ha informado este lunes de que considera abandonar la Bolsa de Londres debido a la caída este año del "volumen de negociación" de acciones ordinarias, las cuales, como consecuencia del Brexit, solo pueden adquirir ciudadanos de la Unión Europea (UE).
"La junta de Ryanair está considerando ahora mantener la cotización estándar" en el parqué londinense, ha señalado la compañía en el informe de resultados presentado hoy, que refleja unas pérdidas netas de 48 millones de euros en el primer semestre fiscal (hasta el 30 de septiembre). No obstante, supone reducir las pérdidas un 88% respecto al año anterior. Además, el tráfico aéreo avanzó un 175% en octubre, con una ocupación del 84%.
Ryanair confirmó el pasado año que a partir de enero de 2021, con la entrada en vigor del Brexit, debía restringir los derechos de los accionistas británicos para asegurar que la mayoría de los títulos de la empresa están en manos de comunitarios.
La normativa de la UE establece que más del 50% de sus acciones deben estar en manos de titulares del bloque, como condición para poder operar en todo el continente bajo la política de "cielos abiertos".
La posible salida de la Bolsa de Londres sería "coherente" con la "tendencia general de negociación de acciones de empresas" comunitarias después de la salida del Reino Unido de la UE.
"Potencialmente, es más aguda para Ryanair, ya que la prohibición impuesta a ciudadanos de fuera de la UE para comprar acciones ordinarias de Ryanair se ha extendido a ciudadanos del Reino Unido tras el Brexit", señaló la aerolínea.
Agregó que la compañía tiene "una cotización primaria Euronext Dublin", la Bolsa de Irlanda, al tiempo que sus títulos también operan en el Nasdaq de Nueva York como "ADR's" (American Depository Receipts, en inglés).