
La referencia española suma su cuarta semana consecutiva al alza y supera la resistencia que puede permitirle acercarse a los niveles pre-pandemia, de los que aún se encuentra a algo más de un 11%. De esta forma, el selectivo reduce distancias y se queda a un 1% del EuroStoxx 50 tras avanzar en el ejercicio algo más de un 12%
El mal dato de empleo de EEUU, mucho peor de lo previsto, no evitó que el Ibex 35 firmara su cuarta semana consecutiva al alza y batiera la cota psicológica de los 9.000 puntos, nivel que no visitaba desde febrero del año pasado. El selectivo español se anotó un alza del 2,7% en cinco sesiones, la mayor entre las plazas del Viejo Continente, tras reponerse del susto que provocaron las palabras de la Secretaria del Tesoro estadounidense, Janet Yellen, tras reconocer que la Fed podría tener que subir los tipos antes de lo previsto, que hundieron al indicador hasta los 8.830,4 enteros el martes. El resto de índices, por su parte, sumaron un 1,8% en el caso del Cac, un 1,7% el Dax y un 1,5% en EuroStoxx 50. En Wall Street, con datos a media sesión, el S&P 500 despedía la semana con un repunte del 1,3% y el Nasdaq cedía en torno a un 1%.
La superación de los 9.000 puntos para el Ibex supone, por técnico, "romper el techo del canal que viene acotando la reconstrucción desde los mínimos de marzo pasado", asegura Joan Cabrero, analista técnico y asesor de Ecotrader, que hace que comprar en estos momentos no sea del todo aconsejable", advierte. Lo cual no es óbice para que, consolidaciones al margen, el selectivo siga mostrando una indudable tendencia alcista que ha puesto de manifiesto en las últimas semanas. "Además", incide, "el alcance de esta cota en el Ibex, coincidiría estratégicamente con la consecución de los máximos de previos a la crisis de 2007 en Europa, los 4.575 puntos del EuroStoxx 50".
La subida de las últimas semanas ha contribuido a que la brecha de rentabilidad entre España y la bolsa europea en 2021 se haya reducido a un punto cuando llegó a ser de 7 puntos a mediados de abril. Asimismo, y aunque aún resta un 11,5% para que el Ibex recupere los 10.083,60 enteros en los que cotizaba el 19 de febrero de 2020, los analistas le conceden por fundamentales un potencial del 5% hasta los 9.520 puntos y un 10% hasta el 10.000, desde el punto de vista técnico.
Resultados y empacho de renovables
La semana en el parqué madrileño estuvo marcada por la batería de resultados trimestrales y el pinchazo de los estrenos de compañías de renovables en bolsa. Con todo, el verdadero protagonista fue Banco Sabadell, donde las sirenas de una posible opa llevaron a la entidad a rebotar un 16% desde el lunes. La siguieron, con un 12%, ArcelorMittal y Fluidra.
Al otro lado, PharmaMar perdió un 10% y Siemens Gamesa y Solaria, un 8% y un 4%, respectivamente, en una semana de caídas generalizadas en el sector de las energías limpias. Mientras que la primera pagó en bolsa la rebaja de objetivo de ingresos para este ejercicio anunciada el viernes anterior, la solar se vio arrastrada por el exceso de renovables que empieza a manifestar el mercado tras el hundimiento bursátil de Ecoener en su debut y la cancelación sine die de la salida de Opdenergy.
Tras conocerse el dato de empleo –EEUU generó solo 266.000 empleos en abril mientras la tasa de paro subió al 6,1%– se reflejó en la renta fija. El T-Note americano vivió un marcado repunte de sus precios, con la consecuente caída de rentabilidad hasta el 1,568% y se aleja del 1,77% que alcanzó a finales de marzo. Mientras, en Europa, el interés del Bund alemán se mantenía estable cerca del -0,21% y el bono español despedía el viernes cerca del 0,48%.
El euro, por su parte, se afianzaba en el cierre europeo por encima de los 1,2120 dólares tras anotarse más de un 1% en la semana frente al billete verde.
Nuevos máximos de materias primas
Las materias primas también continuaron en ascenso. El Bloomberg Commodity Index, que refleja el comportamiento de los futuros de las materias primas, firmó nuevos máximos gracias a que metales como el oro o el cobre siguen al alza. El oro venció la barrera de los 1.800 dólares por onza (niveles que no visitaba desde febrero) tras avanzar cerca de un 3% en cinco sesiones, su mejor registro desde diciembre.
El crudo se mantuvo en zona de máximos de dos meses tras cerrar casi plano la semana. En concreto, el barril de Brent, de referencia en el Viejo Continente, cotiza en el entorno de los 68 dólares tras repuntar un 1,77% en la semana, mientras que el West Texas sumó un 2% hasta los 65 dólares.