
A las acciones de la firma francesa les está costando levantar el vuelo en los primeros días del año, pero siete de cada diez analistas que la siguen aconsejan tomar posiciones. Además, sus beneficios están más baratos en bolsa que los de sus competidores. | Todo sobre el fondo asesorado por elEconomista, Tressis Cartera Eco30.
Resulta curioso que de toda África un grupo de terroristas haya elegido atacar en la provincia de Cabo Delgado, al norte de Mozambique, una región que alberga enormes reservas de gas. Por el momento, se habla de unos 2.500 asesinatos y más de 500.000 personas desplazadas por la violencia.
La empresa francesa Total, que según Bloomberg tiene en la zona la mayor inversión privada de África, ha tenido que evacuar trabajadores de su gran proyecto de extracción de gas natural licuado, valorado en 20.000 millones de dólares y con previsión de funcionar en 2024.
Además de los altos niveles de pobreza en la región, la histórica lucha por el poder no pasa desapercibida para algunos. "Los mwani, en su mayoría musulmanes, recelan de los católicos makonde por la cercanía de estos al poder y sus ganancias", explican desde el medio especializado esglobal.

Un artículo publicado por el Instituto CMI de Noruega, firmado con pseudónimo por miedo a represalias, señala seis posibles escenarios como causa del conflicto en Mozambique, pero ve más probable que se trate de un grupo de insurgentes que actuaría como brazo del ISIS o de una rebelión islamista de los mwani frente a la dominación de los makonde y el Frente de Liberación de Mozambique, en una lucha por el control de los recursos de Cabo Delgado.
Total, valor que forma parte del fondo Tressis Cartera Eco30, asesorado por este periódico, se juega mucho en este conflicto, que podría acabar rompiendo el país africano. El precio de la acción de la firma gala gana un 2,5% en bolsa en lo que va de año después de perder un 28% en 2020, y el consenso de analistas que recoge FactSet estima que la acción aún tiene un recorrido del 18% en los próximos doce meses.
Por otro lado, el beneficio de la compañía francesa se aproximará este año a los 22.400 millones de euros, según las previsiones, una cifra nada deseñable pero que seguirá casi un 22% por debajo del beneficio declarado en 2019, antes de que la pandemia frenase el mundo.
Si se compara con sus principales competidores en el mundo, aquellos con un valor bursátil superior a los 20.000 millones de euros, las ganancias de Total cotizan en bolsa por debajo de la media: en concreto, en las 14 veces a precios actuales. Pioneer Natural Resources, ExxonMobil, o Chevron cotizan por encima de las 20 veces.
Total quiere pertrecharse bien de energías renovables, de ahí que hace unos días anunciase la compra de una participación del 20% en el productor indio de energía fotovoltaica Adani Green, por el que pagará 2.500 millones de dólares. Asimismo, ha anunciado un partenariat con Engie para diseñar, construir y operar la mayor planta francesa de producción de hidrógeno cerca de Marsella.
"Total tiene la mayor capacidad de energía renovable instalada o en desarrollo de todas las grandes petroleras", informan en Bloomberg. Sin embargo, desde la firma de inversión Cowen creen que los años en que Total dominaba entre los gigantes del petróleo han terminado.