
Después de un año como 2019, donde los inversores que se refugiaron en renta fija tras la debacle de los mercados hace casi 12 meses han conseguido un rendimiento extraordinario gracias a la vuelta de los bancos centrales a las políticas monetarias expansivas, volver a retornos mucho más moderados o incluso cercanos a cero puede significar cierta frustración. No en vano, el rendimiento esperado para una cesta representativa de bonos europeos tanto corporativos como de deuda pública se sitúa en el 0,39% según el índice que elaboran Bloomberg y Barclays, después de estar proporcionando hasta el momento un 7,45%.
En el caso de una cesta global, las perspectivas son menos sombrías, pero igualmente reducidas: del 6,34% que ofrecen en la actualidad al 2,15% para los próximos meses, mientras que la deuda corporativa sufre un efecto columpio: de revalorizarse un 13,64% a tener una previsión de tan solo el 2,91%, aunque sigue siendo la más atractiva por rentabilidad.
Porcentajes más acordes con la realidad que viven los mercados de renta fija, donde las últimas actas de la Reserva Federal mostraban la escasa probabilidad de que la máxima autoridad bancaria de los Estados Unidos continúe bajando los tipos de interés, como ha hecho este año, y con una nueva presidenta del Banco Central Europeo que pretende un mayor gasto público de los gobiernos para que la política monetaria deje de ser la única guía de los inversores.
Así pues, los inversores no pueden esperar obtener la misma rentabilidad en el advenimiento de la era de la glaciación de la renta fija. Pero, incluso en este entorno algo más hóstil, pueden encontrar todavía oportunidades de inversión interesantes que pueden ofrecer hasta casi un 11% de media de revalorización, según los datos de Morningstar. Es el caso de los fondos centrados en deuda subordinada en euros.
Gregorio Oyaga, responsable de renta fija de Credit Suisse Gestión, explica que "tiene sentido bajar en la estructura de capital de compañías bien monitorizadas e invertir en su deuda subordinada, en emisiones benchmark, y con opciones de recompra hasta los cinco años. Estas oportunidades surgen por un aspecto jurídico: las entidades financieras están obligadas a emitir esta deuda por Basilea III y las aseguradoras por Solvencia II. Por otro lado, a las compañías no financieras les lleva a emitir esta deuda la metodología de las agencias de rating".
En los fondos focalizados en bonos convertibles de Europa también se pueden encontrar productos que llegan a ofrecer más de un 10% de rentabilidad, como es el caso del Lazard Convertible Europa, con un 12,74%, o el Allianz Convertible Bond, con un 10,57%, superando ambos el poco más del 6% que ofrece de media esta categoría en el año, según los datos de Morningstar. Si se amplía el foco a los bonos convertibles globales, cubiertos en euros, la rentabilidad que se puede alcanzar es un poco más elevada, con fondos como el Franklin Global Convertible Securities, con casi un 13%, o el Mirabaud Convertible Bond Global, con un 12,23%.
Dentro de los fondos que invierten puramente en bonos corporativos sin ninguna restricción por tipo de instrumento, también el inversor conservador puede obtener de media hasta un 6%, con fondos que superan ampliamente este porcentaje, como el Allianz Euro Credit, que proporciona un 10,21% de rentabilidad en el año o el Erste Bond Corporate Plus Vtia –de la gestora Erste, conocida por tener su fondo Erste WWF Stock Environment como líder de la Liga de la Gestión Global de la Gestión Activa de elEconomista–, que consigue un 10,13% de revalorización.
En fondos de bonos de alto rendimiento o high yield en euros también aparecen fondos que superan el 10% de rentabilidad, como el T. Rowe Price European High Yield, con un 11,25%, o el Fidelity European High Yield, con un 11,24%.
Incluso en el caso de los inversores más conservadores en renta fija, que solo quieran recoger el rendimiento de los bonos soberanos, se pueden encontrar productos con un mayor sesgo hacia este tipo de activo, como el NB Euro Bond, de Novo Banco, que ofrece un 13,5%, al que sigue BlueBay Inv. Grd. Euro Gov., con un 10%.
Hay que destacar como en la clasificación de los mejores fondos en estas categorías con algo más de riesgo aparecen nombres de gestoras especialistas en renta fija, como Lazard, Elipsis, Mirabaud, DPMA, Invesco, La Française, Algebris, Vontobel o Credit Suisse, junto a gigantes como Allianz, Schroders o BlackRock.