
El sector de la automoción es estratégico en la economía aragonesa con más de 300 empresas y más de 34.000 empleos, el 27% del total de la industria en esta comunidad, con un volumen de negocio de unos 12.000 millones de euros, lo que representa el 30% del PIB en Aragón.
A pesar de esta importancia en materia económica y de empleo, el sector de la automoción está inmerso en un proceso de transformación con la irrupción del coche eléctrico, pero también dentro de un contexto de caída de las ventas de vehículos, especialmente en España, donde se registra un parque envejecido. Además, también se ha producido un descenso de las exportaciones del sector automotriz.
Con el fin de poder afrontar los retos globales de futuro y seguir atrayendo inversiones, una de las últimas en el sector es la gigafactoría de baterías en la planta de Stellantis de Figueruelas, en Zaragoza, en joint-venture con la china CATL, se ha diseñado un paquete de medidas en el seno del Observatorio Aragonés de la Automoción, con el apoyo de KPGM.
En estos nueve meses, desde la constitución de este observatorio, se ha trabajado en este documento que incluye un total de 37 medidas articuladas en torno a cuatro objetivos centrados en visibilizar el sector aragonés de automoción y su ecosistema; dinamizar el sector a través de la integración, el talento y la tecnología; liderar el futuro ante los nuevos retos globales y diseñar una estrategia compartida.
Dentro de las medidas concretas que se han determinado destacan, por ejemplo, las vinculadas con la simplificación administrativa, así como el impulso a la formación y la recualificación en habilidades digitales, la creación de incentivos para el sector o el diseño y puesta en marcha de un plan integral para que Aragón sea destino estratégico para la atracción de inversiones de gran envergadura.
En el documento también se aboga por crear un fondo de inversiones e impulsar alianzas estratégicas para el sector con el fin de financiar grandes proyectos tractores vinculados, por ejemplo, con la movilidad sostenible y la transición energética hacia el vehículo eléctrico y la descarbonización.
Otras propuestas se centran en poner en marcha una red de centros y espacios de innovación colaborativa y revisar el inventario de recursos disponibles en centros tecnológicos, universidades y otras entidades de acuerdo con las necesidades del tejido empresarial.
La digitalización forma parte de este paquete de medidas con el fin de que se diseñe un plan específico para el sector de la automoción. Además, se incide en la necesidad de crear una aceleradora especializada en la manifactura y sus procesos logísticos para apoyar a empresas emergentes y pymes que desarrollen tecnología avanzada. Esta última iniciativa comprende a su vez la realización de mentorías y disponer de instalaciones de pruebas. Además, se debe trabajar en la conexión con las grandes empresas.
Las sinergias con otros clústeres o plataformas tecnológicas europeas son otra medida que se considera necesaria, al igual que apostar por la formación dual, la formación continua y el reciclaje profesional. También se pone el foco en otras acciones como dar a conocer los atractivos del sector de la automoción para mejorar la percepción que tienen los ciudadanos, sobre todo los jóvenes para atraerles en el plano laboral.
Precisamente, en el ámbito del trabajo, se han concretado una serie de medidas dirigidas a reducir el absentismo laboral y mejorar la productividad, retener el talento y atraerlo en las zonas rurales, entre otras.
El documento recoge a su vez acciones para mejorar la competitividad dentro de un entorno global. Un segmento en el que se incluye la diversificación del negocio en sectores emergentes vinculados con la movilidad sostenible, las baterías eléctricas y las energías renovables. También se incide en un plan urgente de inversión estratégica en tecnología, formación y de apoyo a pymes.
El fomento de la colaboración público privada para la atracción de inversiones es otro eje clave, así como la optimización de la cadena de suministro, el fomento del crecimiento inorgánico de las pymes a través de fusiones y absorciones o la elaboración de un estudio que ofrezca una imagen real y actualizada del peso que el sector de automoción tiene en la economía de la comunidad autónoma.
Finalmente, en materia de sostenibilidad, se recogen propuestas como la creación de itinerarios para la descarbonización y la economía circular, la clarificación de la legislación sobre combustibles neutros en carbono, la descarbonización de procesos productivos y logísticos, la promoción del transporte compartido entre empresas o la adopción de criterios ESG (ambientales, sociales y de gobierno corporativo).
En este plano de la sostenibilidad también se aboga por poner en marcha un programa específico de incubación y aceleración centrado en este tema, así como una plataforma de gestión de residuos industriales, con la colaboración público-privada, para su gestión y valorización eficiente.
Son algunas de las 37 medidas consensuadas en el Observatorio Aragonés del Sector Automoción, impulsado por el Clúster de Automoción y Movilidad de Aragón (CAAR) y la Federación de Empresas del Metal de Zaragoza (FEMZ). Sus conclusiones se han dado a conocer en Mobility City, en Zaragoza, dentro de un acto en el que se ha contado con la vicepresidenta y consejera de Presidencia, Economía y Justicia del Gobierno de Aragón, Mar Vaquero; el presidente del Clúster de Automoción y Movilidad de Aragón y de la FEMZ, Benito Tesier; el coordinador de Mobility City, Jaime Armengol; la secretaria general de la Federación de Industria de CCOO Aragón, Ana Sánchez y el secretario general de la Federación de Industria, Construcción y Agro de UGT Aragón, Sergio Sancho.