Valencia
El grupo valenciano GDES (Grupo Dominguis Energy Services), que precisamente inició su actividad en la industria nuclear hace más de 45 años participando en la construcción de la Central Nuclear de Almaraz, ha incrementado notablemente su plantilla en la planta cacereña para hacer frente a los trabajos ligados a la operación de recarga.
La empresa, que mantiene de forma permanente un equipo de 60 especialistas en las instalaciones de la central extremeña de Almaraz I, ha incorporado otros 170 profesionales especializados para hacer frente a los trabajos programados durante la recarga previstas. Una cifra que supone un incremento del 283% durante algo más de un mes.
GDES realiza tareas de operación, mantenimiento, ingeniería y tratamiento de superficies en esta instalación durante todo el año. Dentro de los trabajos por recarga de la unidad, se encarga principalmente de la ejecución de tareas de aislamiento térmico y reflectivo, sellados y protecciones pasivas contra el fuego, descontaminación, limpieza industrial y análisis químicos además de servicios de tratamiento de superficies.
En pleno debate sobre el cese de actividad de las centrales nucleares españolas, la Unidad I de la central nuclear de Almaraz ha iniciado el 7 de octubre, la que es su trigésima recarga de combustible. Una tarea de 34 días de duración que implica la sustitución de algo más de un tercio de los elementos combustibles del núcleo y donde se aprovecha para efectuar numerosas actividades para la mejora de la seguridad y el mantenimiento.
Debate político y empresarial
En este caso, se trata su penúltima recarga si finalmente se lleva a cabo el plan de cierre de las centrales nucleares españolas, contra el que se han alzado voces en contra desde el propio Gobierno extremeño. Un rechazo que se suma el de la Generalitat Valenciana de Mazón para Cofrentes o la patronal catalana Foment, que alerta de un apagón industrial.
La central de Almaraz, con dos grupos, aportan el 7 por ciento de la demanda eléctrica nacional, lo que equivale al consumo de 4 millones de hogares españoles.
