
El presidente de BBVA, Carlos Torres, ha enfrentado esta mañana preguntas sobre el caso Villarejo junto al gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos. Ambos han abierto las jornadas sobre 'Finanzas Sostenibles' que se celebran esta semana en la ciudad de Santander. El número uno de la institución supervisora insistió de nuevo ante Torres a que la entidad que encabeza analice el caso Villarejo "con celeridad" para superar cuanto antes el impacto reputacional. No obstante, el gobernador no quiso incidir más en el escándalo de las escuchas ilegales bajo el argumento de que la trama está bajo investigación judicial. "Eso nos hace pasar a un segundo plano", espetó.
Por su parte, Torres también se parapetó en el paraguas de la investigación para evitar dar explicaciones al respecto. "La investigación interna sigue su curso, pero que está supeditada a la investigación judicial que es la importante. Además ha sido declarada secreta y, por ello, no puedo ni debo comentar nada sobre unas actuaciones sujetas a investigación judicial", aseguró el presidente de BBVA quien, añadió, que el banco está "colaborando activamente" con la Justicia. "La investigación importante no es la nuestra, sino la de la Audiencia Nacional", dijo.
Precisamente, de Cos destacó en su discurso de apertura de las jornadas bancarias que uno de los riesgos más relevantes del sector financiero en la actualidad es levantar su reputación. "Más allá de los costes que la litigiosidad pueda representar para las entidades, existe una implicación más general, que es la pérdida de reputación que significa para el sector bancario. Las entidades deben esforzarse en revertir esta percepción proporcionando a sus clientes la información precisa de manera clara y transparente, y facilitándoles el acceso a productos financieros adecuados a sus necesidades y conocimientos financieros", dijo.