
El consejero delegado de FCC, Pablo Colio, ha ratificado hoy los objetivos estratégicos del grupo en el largo plazo a pesar del impacto y las incertidumbres que genera la crisis por el Covid-19. La junta general de accionistas ha aprobado, asimismo, el reparto de un dividendo flexible de 0,40 euros por acción, similar al entregado en 2019, año en el que la compañía retomó la retribución a los inversores suspendida desde 2013.
En su discurso en la junta general de accionistas, celebrada de manera telemática, Colio ha incidido en que "con la continuidad de los servicios esenciales esperamos paliar los efectos negativos de esta crisis". Entre ellos, ha mencionado la recogida de residuos, la limpieza viaria, el ciclo integral del agua y la gestión de infraestructuras de transporte. A este respecto, ha remarcado que durante los tres primeros meses del año el grupo "ha obtenido unos resultados positivos que no se han visto afectados de forma sustancial por el impacto del Covid-19".
El consejero delegado ha subrayado que tras la nueva etapa iniciada en 2014 con la entrada en el accionariado del Grupo Carso, propiedad del mexicano Carlos Slim, FCC es hoy en día un grupo "fortalecido y renovado". En este sentido, las medidas adoptadas en los últimos cinco años han permitido a la compañía "obtener una sólida posición tanto operativa, como de estructura y financiera".
"No nos desviará de nuestros objetivos estratégicos y compromisos sociales en el largo plazo"
Colio ha destacado que "la experiencia de FCC en todo el desarrollo integral de un proyecto constituye una ventaja en el futuro tanto a nivel nacional como internacional". El directivo ha asegurado que la empresa afronta "un periodo de transición dentro de la incertidumbre que estamos viviendo, pero que no nos desviará de nuestros objetivos estratégicos y compromisos sociales en el largo plazo".
Los retos de FCC discurren por "seguir siendo líder en los países en los que opera, manteniendo su posición competitiva en los mercados consolidados a través de preservar la calidad y continuidad de sus servicios". Asimismo, trabajará en la "valoración del potencial y los riesgos del aumento de la cartera internacional de proyectos, así como el aprovechamiento de sinergias entre las distintas áreas de negocio". La multinacional española aspira, además, a "ser una compañía facilitadora para sus clientes estableciendo relaciones a largo plazo, con la fiabilidad de una gran empresa líder, pero a la vez local".
La estrategia de FCC y sus diferentes áreas ahondará en los planes de internacionalización
La estrategia de FCC y sus diferentes áreas ahondará en los planes de internacionalización. En esta línea, FCC Medioambiente y Aqualia abordan su crecimiento en Europa, el Norte de África y Oriente Medio, así como en Norteamérica y Latinoamérica. "En Oriente Medio y Norte de África existen proyectos de interés en la desalación del agua de mar y en depuración de aguas residuales en el área del agua, tecnologías éstas que se encuentran entre las especialidades de Aqualia". De igual modo, "América es también un mercado con un alto potencial de desarrollo para el área de servicios medioambientales gracias al know-how, la experiencia y la utilización de tecnologías más avanzadas y eficientes en la prestación de servicios".
En Medio Ambiente, "la exportación de RDF (combustibles, derivados de residuos) a Europa se prevé que continúe en descenso, aunque surgirán otras oportunidades para el grupo por su grado de diversificación en la cadena de producción", ha señalado Colio.
Colaboración público-privada
Para las áreas de construcción y concesiones, "el sistema de colaboración público-privada está esbozándose como una realidad que tenderá a crecer en mercados con dificultades de inversión por parte de las administraciones públicas", ha apostillado.