El turismo representa en España el 12,5% del Producto Interior Bruto (PIB), un porcentaje que se multiplica hasta el entorno del 35% si incluyen todos los servicios asociados. Genera, además 2,3 millones de empleos. Es por tanto pieza estructural para la economía española. El Gobierno, sin embargo, ha dado la callada por respuesta a todas las demandas de un sector integrado por miles de empresas de todos los tamaños que están viendo amenazada su supervivencia por la crisis desatada por el Covid-19. Varios ministros ya han anticipado públicamente que la desescalada en el caso del sector turístico no llegará hasta finales de año y el vicepresidente segundo, Pablo Iglesias, aboga incluso por minorar su peso en el futuro económico español.
La actividad turística, motor sobre el que España se ha apoyado en la última década para impulsar la recuperación de la crisis de 2008, está ahora paralizada completamente y el horizonte para voltear esta situación cada vez se proyecta más alejado en el tiempo.
La hoja de ruta para el desconfinamiento trazada por el Gobierno apunta a que la desescalada del turismo no se producirá hasta finales de año. Así lo han señalado en los últimos días las ministras de Hacienda, María Jesús Montero, y de Trabajo, Yolanda Díaz, así como el titular de Consumo, Alberto Garzón, sin que ni el presidente Pedro Sánchez ni la ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, en sus declaraciones del fin de semana, hayan arrojado luz en una dirección distinta.
El turismo no ha merecido, al menos hasta ahora, las atenciones por parte del Gobierno que el sector reclama
La incertidumbre para el turismo es cada vez mayor, consecuencia de la dicotomía en las decisiones de Gobierno a tomar tanto en España como en la Unión Europea (UE), entre alargar las cuarentenas por razones sanitarias o acelerar los protocolos de apertura de actividad y movilidad interna y la externa entre distintos países.
La falta de medidas concretas para el turismo en España adivina ya un impacto que, en función de cuándo y cómo se implemente finalmente la desescalada en la actividad turística, oscilará, según los últimos cálculos de Exceltur, entre los 92.556 millones de euros, el 60,7% de los ingresos que el sector preveía para este año (158.000 millones) y los 124.000 millones, el 81,4%, un nivel que "que ningún sector económico podría resistir, sin verse arrasado antes por el camino", avisa la organización.
El turismo, pese a erigirse en la industria que más y a mayor velocidad ha caído y tener una escasa visibilidad sobre el retorno de su actividad, no ha merecido, al menos hasta ahora, las atenciones por parte del Gobierno que el sector reclama. Una posición que contrasta con la adoptada por Estados Unidos, Alemania, Francia y Reino Unido, que han aprobado ayudas muy contundentes, y que encaja, además, en la pretendida reconstrucción de la economía en la que el turismo ya no emerge con el papel que le merece su peso en el PIB.
Menor dependencia del turismo
Pablo Iglesias ha puesto negro sobre blanco esta una nueva realidad económica en la que la dependencia del turismo, en el que abundan los empleos temporales y precarios, se minimice. "Nuestro país, como cuarta economía de la zona euro, no puede depender exclusivamente de los sectores económicos que han sido hegemónicos en España en las últimas décadas, como el sector inmobiliario o el turismo. El turismo siempre va a existir en España, va a ser fundamental, vamos a tener que protegerlo, pero nuestro país tiene que diversificar su producción. Tiene que producirse una transición ecológica en los términos que ya habíamos apuntado, pero en este momento es evidente que toca acelerar como proyecto de país", ha afirmado en una entrevista en el digital 'Cuarto Poder'.
Hasta el momento, el único gesto del Gobierno con el turismo fue la prelación de las líneas de avales dispuestas por 400 millones. Una iniciativa que el vicepresidente ejecutivo de Exceltur, José Luis Zoreda, califica de "broma de mal gusto".
Relacionados
- El turismo pone números a Yolanda Díaz: el impacto crece de 60.000 a 90.000 millones
- UGT pide garantizar la incorporación en Canarias de la masa laboral al turismo
- El turismo español pierde 18.000 millones de euros en Semana Santa por la pandemia de coronavirus
- El turismo empeora en 15.000 millones sus previsiones y dilata la recuperación hasta septiembre