
El sector de los hospitales privados vive actualmente inmerso en una dinámica de compras protagonizada por tres grandes grupos: Vithas, HM Hospitales y Ribera Salud. Esta compañías buscan hacer frente a Quirónsalud, el gran gigante del sector en España desde que aglutinó bajo esta marca a los hospitales Quirón, Capio y USP Hospitales. Esta compañía -que desde 2016 pertenece al grupo alemán Fresenius Helios- suma cerca de 45 hospitales en toda España y una facturación superior a los 2.500 millones.
Y sus perseguidores andan aún lejos de esas cifras. El grupo Vithas, con 19 hospitales y participado en el 80% por los Gallardo (dueños de Almirall), a través su vehículo familiar Goodgrower, y en un 20 por Criteria Caixaholding, facturó el pasado año 535 millones de euros; mientras que el grupo HM Hospitales, propiedad de la familia madrileña Abarca, suma 16 hospitales y unos ingresos anuales de 415 millones. Por su parte, la valenciana Ribera Salud ha dado este año el salto de la concesión de hospitales públicos, donde fue pionera, a comprar centros sanitarios privados. El grupo, propiedad ahora al 90%, de la compañía americana Centene, cerró el año 2017 con una facturación de 453 millones.
Ahora, el objeto de deseo de estos tres grupos está siendo el hospital de La Milagrosa, en Madrid. La Iglesia ha decidido poner en venta la histórica clínica de la calle Modesto Lafuente del barrio de Chamberí en Madrid. El hospital es propiedad de la congregación de los Padres Paules y su gestión está integrada desde hace unos años en el grupo Hospitales Católicos de Madrid, la unión que llevaron a cabo nueve centros hospitalarios de la Iglesia en la capital.
Vithas, que nació en 2012 de los antiguos hospitales de Adeslas, ya movió el sector en 2017 con la compra de los siete hospitales Nisa por unos 300 millones de euros y se situó como el segundo gran grupo hospitalario. El grupo liderado por Jorge Gallardo Piqué -hijo del presidente de Almirall- ha mantenido conversaciones con HM Hospitales para intentar una posible fusión con la que hacer frente a Quirónsalud.
En HM (Hospitales de Madrid), la familia de médicos Abarca descarta de momento una unión y siguen centrados en aumentar su presencia fuera de la capital de España. El grupo presidido por Juan Abarca Cidón inició su expansión por toda España hace unos años y ha comprado hospitales en Galicia, León y Cataluña. Recientemente ha anunciado una inversión de 25 millones en el hospital Delfos de Barcelona, que adquirió el año pasado. También ha anunciado octavo hospital en la Comunidad de Madrid, en el municipio de Rivas Vaciamadrid.
Desde Valencia, Ribera Salud ha firmado esta semana la compra del 93% del hospital vigués Povisa, propiedad hasta ahora del grupo Nosa Terra XXI. El centro es, con más de 40.000 metros cuadrados, 500 camas y 1.500 trabajadores el hospital privado más grande de España y ahora la compañía dirigida por Alberto de Rosa pasará a dar servicio a 134.000 pacientes de la sanidad pública en el marco de un concierto de colaboración público-privada con el Servicio Gallego de Salud.
Crecimientos del 4%
Los hospitales de compañías sanitarias presentes en España facturan hoy en conjunto casi 1.000 millones de euros más que hace solamente cuatro años. En concreto, el mercado hospitalario privado español no benéfico -excluye a los centros de órdenes religiosas- alcanzó en el año 2017 (último año con cifras oficiales) una facturación de 6.405 millones de euros, mientras que cuatro años atrás, en 2013, los ingresos de estas compañías fueron de 5.481 millones, un total de 924 millones más.
Estas cifras dan una idea de la buena salud de la que goza el sector en España, con un crecimiento de ingresos cercano al 17% en estos cuatro años, lo que supone una tasa de subida sostenida del 4% cada año. "Las cifras demuestran que somos un sector pujante e innovador que es referente tanto dentro como fuera de España", asegura Adolfo Fernández-Valmayor, directivo del grupo Quirónsalud y miembro de la Fundación IDIS, el organismo que agrupa en España a los grupos sanitarios privados.
Según los datos ofrecidos por esta fundación en su informe anual sobre el sector, hasta el 63% de la facturación de lo hospitales privados proviene de sus conciertos las aseguradoras de salud. Y es que el sector de los seguros de salud también continúa registrando incrementos significativos en nuestro país, tanto en número de asegurados como en volumen de primas. En 2018 se han superado los 10,3 millones de españoles con seguro médico, lo que supone un incremento del 4,3% respecto al año anterior. El resto del negocio de los hospitales privados proviene por un lado de los conciertos públicos (un 25%), los pacientes privados puros (un 10%) mientras que la restauración y el parking suponen el 2% de sus ingresos.
Necesidad de ganar tamaño
Las últimas fusiones entre grupos hospitalarios, protagonizadas en los últimos años por Quirónsalud y Vithas responden a la necesidad de estas compañías de ganar tamaño para poder negociar mejor con sus principales clientes, las aseguradoras de salud, principalmente Adeslas, Sanitas y Asisa, que copan el 60% del mercado total. Hasta ahora, los hospitales privados se han visto históricamente en clara desventaja con estas aseguradoras que son las que nutren de pacientes a los hospitales y les fijan una tabla de precios por servicio sanitario realizado, en función del volumen de clientes.
Esta inferioridad la rompió en su momento el grupo Quirón, que tras ser adquirida en 2016 por el grupo alemán Fresenius Helios por 5.760 millones, ya incluye en su red de clínicas como la Ruber o La Luz, acumulando casi el 30% de cuota del mercado ciudades como Madrid y Barcelona y acercándose al 10% en el resto de España. Ahora Vithas y HM Hospitales buscan la misma estrategia para poder competir. Y es que en el mercado hospitalario sigue mandando la atomización. Las principales compañías fuera de Quironsalud se reparten apenas una cuota de mercado de entre el 2 y el 3% cada una.