Reducción de la jornada laboral: ¿Qué pasa si en mi empresa ya trabajo 37,5 horas o menos?

El artículo 34 del Estatuto de los Trabajadores está en el punto de mira. Actualmente, recoge que "la duración máxima de la jornada ordinaria de trabajo será de 40 horas semanales de trabajo efectivo", algo que está a punto de cambiar con la última propuesta del Gobierno para 2025, que se basa en una reducción de jornada laboral a un máximo de 37,5 horas semanales.

Esta previsto que esta novedosa medida en cuanto a las reducciones de jornada se apruebe en el próximo Consejo de Ministros, que se llevará a cabo el 4 de febrero. Esto no quiere decir que entre inmediatamente en vigor, sino que habrá que esperar hasta casi mediados de 2025, en torno al mes de mayo, según señalaron fuentes del Gobierno.

¿Qué pasa si mi jornada es de 37,5 horas o menos?

Ante esta nueva normativa pendiente de aprobar, muchos trabajadores se encuentran en estado de incertidumbre, ya que, en la mayoría de empresas, hay muchos empleados que ya tienen jornadas semanales de 37,5 horas o, incluso, menos. ¿Qué pasa en estos casos?

En primer lugar, hay que saber que el actual Estatuto de los Trabajadores indica que "la duración de la jornada de trabajo será la pactada en los convenios colectivos o contratos de trabajo". Esto quiere decir que, en caso de tener una jornada de menos de 40 horas semanales, es gracias a un convenio colectivo o propio de la empresa, por lo que esta nueva medida no afectaría de ninguna forma a estos trabajadores.

¿Cómo afecta a los trabajadores a tiempo parcial?

Además de los trabajadores que tengan estipulado por convenio que su jornada laboral es de menos de 40 horas semanales, hay otro tipo de empleados que pueden tener dudas sobre la reducción de jornada: aquellos que tienen contratos parciales.

Los trabajadores con jornada parcial son aquellos que realizan jornadas entre 30 y 35 horas semanales. ¿Cómo afecta la nueva medida en estos casos? Pues bien, en primer lugar, el borrador de la norma recoge que todos estos trabajadores podrán seguir realizando el mismo número de horas semanales que hasta ahora. Sin embargo, hay un matiz beneficioso para ellos, ya que se indica que podrán optar a un "incremento proporcional de su salario".

De este modo, la empresa no podrá reducirles proporcionalmente el número de horas a los trabajadores a tiempo parcial, teniendo en cuenta que, ahora, la jornada completa no van a ser 40, sino 37,5 horas. Podrán seguir, así, realizando el mismo número de horas semanales.

Por el contrario, sí que van a poder ver aumentado su salario de forma proporcional, ya que, de lo contrario, su salario se vería devaluado. ¿Por qué? Porque los trabajadores a tiempo completo van a pasar a realizar menos horas salariales sin que esto afecte a su salario, por lo que los de tiempo parcial deberían poder cobrar esta compensación para igual la norma a todos los trabajadores, independientemente del tipo de contrato que tengan.

La jornada real de los trabajadores en España

Hay un matiz o dilema que afecta a esta reducción de jornada laboral. En el caso de España, aunque las jornadas laborales a tiempo completo son, en teoría, de 40 horas, lo cierto es que la aplicación en la práctica no es así. Esto viene marcado por una precariedad y una rotación laboral excesivas, que hace que muchos trabajadores quieran ampliar más las horas trabajadas para, así, cobrar más. Pero no lo consiguen.

Según los datos de la EPA, uno de cada diez trabajadores españoles quiere trabajar más horas, el doble de los que quieren reducir su jornada (aunque hay que matizar que el INE pregunta por un recorte de horas acompañado por uno proporcional del sueldo).

De hecho, el promedio anual de horas efectivas trabajadas en nuestro país pasó de 37,28 horas en 2008 a 35,47 en 2023. Además, se aprecia una brecha ente este dato y el de las horas "habitualmente trabajadas", que se sitúa en 36,7, muy por debajo de las 38,05 de 2008.