Economía

El paro en Francia sube al 7,4% en verano y aleja a Macron de su objetivo de pleno empleo

  • El presidente quiere conseguir que el desempleo llegue al 5% de aquí a 2027
  • Los datos se conocen tras la aprobación de una reforma del mercado laboral 
El presidente de Francia, Emmanuel Macron. // Foto: EP.
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Los datos de paro alejan cada vez más a Emmanuel Macron de alcanzar el pleno empleo en Francia en 2027. Este verano, la tasa de paro se incrementó en el país vecino un 0,2% hasta el 7,4% de la población activa según los datos del Instituto Nacional de Estadística y Estudios Económicos (INSEE por sus siglas en francés). El objetivo del jefe de Estado galo es conseguir que de aquí a cuatro años es que dicha tasa caiga hasta el 5%. La tendencia a la baja del paro desde 2017 se ha revertido claramente con estas cifras.

El presidente Emmanuel Macron repitió hasta la saciedad durante la campaña electoral de 2022 que quería ese pleno empleo antes de rematar la década, pero está en un contexto muy difícil. El conflicto entre Israel y Hamás, con Gaza de por medio, que ha generado una importane escalada del antisemitismo en Francia, la guerra de Ucrania o la lcuha contra el calentamiento global alejan al presidente de sus esfuerzos por mejorar el ercado laboral, lo que le genera otra dificultad más en el final de su mandato.

Este segundo aumento trimestral consecutivo es algo superior al 7,3% que anticipó el INSEE en su último informe económico. Aunque es cierto que esta no es la tasa de desempleo más alta que registró el país. En 2015 se situó en el 9,5%.

Con este incremento, el número de parados en francia asciende a 2,28 millones, lo que añade a las listas de demandantes de empleo 64.000 personas más entre junio y septiembre. Para el jefe de sección de Mercado Laboral del INSEE, Yves Jauneau, aún es "muy pronto" para saber si esta tendencia es parte del cliclo económico de la desaceleración mundial o e es una inversión de la curva laboral del mercado laboral francés. "Se trata de un ligero aumento tras varios trimestres de relativa estabilidad", aseguró. Además aclaró que "todavía estamos muy por debajo del nivel anterior de Covid".

El ministro de Trabajo francés, Oliver Dussopt, achacó a la coyuntura económica mundial "un aumento de este tipo", también lo relacionó con el endurecimiento de las políticas monetarias y "las tensiones geopolíticas".

Estos datos negativos salen un día después de que la ley de "pleno empleo" del Ejecutivo fuese aprobada definitivamente por la Asamblea Nacional. El propio ministro de Trabajo aseguró que esta ley "crea nuevas herramientas para avanzar hasta nuestro objetivo central: el pleno empleo para todos y en todas partes". Aunque otras instituciones como el Banco de Francia desdice un poco el argumentario del Gobierno, ya que vaticinan que la curva del empleo seguirá a la baja.

Reorganizar el servicio público de empleo

El nuevo documento, acordado por diputados y senadores, pretende hacer una "reorganización integral" el servicio público de empleo francés. La tradicional Pôle Emloi gala pasará a llamarse France Travai y obligará todas las presonas que reciban el ingreso mínimo vital a seguir un cronograma semanal de actividad a cambio del compromiso de la organización referente a ayudarlos de manera más intensiva.

Pero desde el Ejecutivo francés también juegan con la baza de que la reforma de las pensiones aumentará la tasa de empleo entre las personas de 60 a 64 años. Pero no cuentan con la arista estructural de que a los desempleados mayores de 62 años les es prácticamente imposible escapar de la exclusión laboral. Este problema todavía no se ha abordado en la mesa de diálogo social, que todavía están a la espera de un documento preliminar del Gobierno sobre el que poder negociar.

El director general del INSEE, Jean-Luc Tavernier, recordó que el pleno empleo se consigue una vez se supere la marca del 7% (la última vez que Francia alcanzó esta tasa fue a comienzos de los años 80) y aseguró que "es posible" gracias a las reformas que se llevaron a cabo en la última década.

En cambio, apuntó a dos motivos que le hacen ser pesimista: por un lado está la "preferencia nacional", dijo, que hace que la reducción del paro sea prioritaria cuando está por encima del 10%, relegada por detrás del poder adquisitivo cuando está entre el 7% y el 8%. El directivo mostró su "sorpresa" ante las grandes dificultades que tienen las empresas para contratar con una tasa de paro "que sigue siendo relativamente alta". La solución para él es clara: "la formación".

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