
En plena tensión entre el empresariado y Podemos por las declaraciones de varios ministros y líderes del partido morado sobre los empresarios, el presidente de la patronal valenciana CEV, Salvador Navarro, insta a la vicepresidenta y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, a que no bloquee la aprobación de las obras para la nueva terminal de contenedores del puerto de Valencia, que supone una inversión de más de 1.500 millones de euros.
La licitación de la parte pública de las obras debe ser aprobada en las próximas semanas por el Consejo de Ministros después de tres años de batalla administrativa por el intento de Compromís y Podemos de impedir su construcción, con continuas trabas administrativas desde el Ayuntamiento de Valencia de Joan Ribó e incluso desde algunos departamentos de la Generalitat Valenciana, pese al respaldo de la parte socialista.
Navarro aseguró que espera que el Gobierno apruebe antes de las próximas elecciones autonómicas y municipales del 28-M "si la vicepresidenta y ministra de Trabajo no pone más problemas". El presidente de la patronal considera que "ahora la decisión es política" después de que la tramitación fuese respaldada por Puertos del Estado.
Navarro, que siempre define el Puerto de Valencia como "la última joya de la corona" que le queda a Valencia tras la desaparición de sus cajas de ahorros mostró su confianza en que "no se paralice una inversión necesaria" por "cuestiones electorales", ante el rechazo que provoca en Compromís y Podemos la terminal que promueve MSC, la mayor naviera mundial por capacidad de contenedores.
Precisamente el presidente de CEV, que presentó las propuestas de la patronal para las próximas elecciones autonómicas y municipales, aseguró que los empresarios valencianos quieren quedar al margen de ese debate pese a que desde algunos partidos se ataca a empresarios. Después de que el propio vicepresidente segundo valenciano, Héctor Illueca, se sumase a esas críticas a líderes como Juan Roig o Vicente Boluda, Navarro aseguró que siempre ha tenido buena relación con él y que al igual que con el Botànic, más allá de las diferencias siempre se han podido alcanzar acuerdos.
"Lo único que podría lamentar es que una persona que considero bastante sensata se mueva por las consignas de Madrid, por lo que dice su partido desde Madrid", señaló el presidente de CEV al ser preguntado sobre si la tensión por la campaña electoral no podría trasladar esa crispación a los agentes sociales en la Comunidad Valenciana.
Precisamente el presidente de CEV, que como viene siendo tradicional desde hace ya varias legislaturas volvió a situar la reforma de la financiación autonómica y la quita de la deuda valenciana como grandes prioridades, consideró que algo que afea la política valenciana es "la dependencia de Madrid".
"Ojalá tuviéramos como Cataluña, País Vasco o Canarias un partido que fuera referencia de la Comunidad Valenciana", aseguró, además de considerar que "tenemos que olvidar las mayorías absolutas" en la comunidad, pese a reconocer que "hay dos partidos, PSOE y PP, que tienen visión de Estado" y por ello instó a que se cumplan las promesas electorales sobre la financiación que seguro que se vuelven a repetir esta campaña.
Competencia fiscal
En el ámbito concreto de los impuestos, Navarro reconoció que no coinciden con el Gobierno de coalición actual en la "competencia fiscal", ya que consideran positivo que haya competencia entre autonomías como ocurre entre municipios y empresas. Precisamente otra de las prioridades recogidas en las prioridades es "retrasar o eliminar la entrada en vigor de nuevos tributos", además de "aligerar la carga fiscal".
Una petición que se concreta en reclamar "derogar la tasa turística", además de pedir una bonificación autonómica del 100% del Impuesto de Patrimonio, que precisamente CEV con Foment han llevado al Defensor del Pueblo para que se aborde su inconstitucionalidad.
También insta a que la Generalitat cree un Observatorio para planificar las inversiones en infraestructuras prioritarias y hacer un seguimiento de sus ejecuciones.