Economía

Los economistas recortan las previsiones del PIB a la baja: un 3,8% para 2022 y, un 0,9% para 2023

  • Avisan del alta tasa de inflación subyacente a la que ha llegado España
  • Elevan la tasa de desempleo hasta el 12,7% y el 12,9% para este y el siguiente año
  • Advierten del peligro de ligar gastos estructurales a la inflación
Valentí Pich, presidente del Consejo General de Economistas.

Malas noticias para el Gobierno. En línea con la mayoría de instituciones, el último informe del Consejo General del Economistas -publicado este lunes- ha revisado a la baja los datos del PIB para este año y el próximo, dejando la previsión en un 3,8% para 2022 -seis décimas de la previsión de Nadia Calviño-, y en el 0,9% para 2023 -es decir, un punto menos que lo previsto por el Ejecutivo de Pedro Sánchez-. Además, el Consejo General de Economistas mantiene la tasa de inflación subyacente en el 6,2%, en una jornada en la que la inflación de la eurozona se deboca y escala a un récord del 10,7% en octubre.

Precisamente en cuanto a la variable que mide el IPC, el CGE destaca el "alto porcentaje que supone el componente estructural de la inflación", que es "donde se centra" el problema, dado que es "independiente de la coyuntura geopolítica en la que estamos inmersos".

Aumentar la productividad

El informe subraya que el hecho de que el incremento de los precios en España vaya a ser inferior a los de la Eurozona, también en octubre, "podría ayudar a que las exportaciones tengan más peso en la economía, ahora que parece que la demanda interna y el turismo se están estancando". Para ello, reclaman que, además de ser más competitivos en precios, es "necesario" incrementar la productividad de las empresas.

Respecto a la tasa de desempleo, el análisis pone el foco en la baja de cerca de 46.000 empresas durante de 2022, afectadas por "el incremento de los precios energéticos, las cargas sociales y la presión fiscal a lo que se ha unido el incremento de los tipos de interés". Sobre esta última subida, el organismo asevera que les parece "elevada" ya que "debilita aún más la demanda" y apunta que es "posible" que aumente la tasa de morosidad en los próximos meses.

Por otro lado, la subida de la tasa de paro en la última Encuesta de Población Activa (EPA) hasta el 12,67% lleva a los expertos a considerarla como un "aviso de lo que podría suceder en los próximos trimestres" y a revisar su previsión de desempleo para 2022 tres décimas al alza, hasta el 12,7%, y hasta el 12,9% en 2023.

Los precios de la energía y las materias primas "cederán en el primer semestre 2023"

Por otro lado, la previsión del organismo es que los precios de la energía y las materias primas "cederán en el primer semestre 2023" por las medidas de política monetaria "tendentes a enfriar el consumo".

A esta cuestión, consideraran "necesario" sumar un pacto de rentas "para que tanto los márgenes empresariales como los sueldos se mantuvieran con objeto de no generar inflación de segunda ronda".

El efecto de los fondos

Asimismo, sostienen que los fondos europeos "no están siendo aplicados al ritmo que estaba previsto". De los 47.000 millones asignados para 2022, solo "parece que se van a utilizar entre 9.000 y 15.000 millones de euros, lo que hace que el efecto en el PIB sea irrelevante".

Sobre los Presupuestos Generales del Estado para el año 2023, criticaron que la diferencia entre las previsiones macroeconómicas utilizadas por el Gobierno frente a la del resto de analistas unida al "riesgo de ligar gastos estructurales a la inflación" pueden "dificultar su cumplimiento dadas las actuales circunstancias".

No obstante, aplaudieron la inclusión de otras partidas para financiar políticas destinadas al comercio, el turismo y las pymes, así como el incremento del gasto en infraestructuras, ya que "podrían ser un revulsivo para la economía por su incidencia para la generación de empleo y el fortalecimiento del tejido productivo de España".

WhatsAppFacebookTwitterLinkedinBeloudBluesky