Economía

Así afecta la inflación a los pingüinos: el rechazo a la dieta del pescado barato

  • Un acuario japonés cambió la dieta de los animales por el alto precio del jurel
Foto: Captura video/TV Asahi.

Los expertos en economía están por estos días en las portadas de miles de medios. El tema del que hablan no es otro que el de la inflación, subida de precios, recesión: apocalipsis. Analizan todo el campo de las posibilidades de ahorro o de inversión, pero desde una perspectiva de acción humana para un beneficio humano.

Pero, detengámonos y analicemos como nuestras acciones de recesión, ahorro o inversión pueden afectar a nuestro entorno, como por ejemplo a las comunidades de los pingüinos. Quienes parecen no estar contentos por nuestras medidas de urgencia.

Extrapolar lo que está pasando en el mundo, a partir del convencional análisis financiero, nos da un entendimiento más terrenal, más explícito. Ver la conducta animal ante un fenómeno causado por nosotros mismos (guerras, desajustes, inestabilidad política, entre miles otros) da esa cuota que nos falta para saber dónde y cómo estamos parados.

Los afectados de Tokio

Así ven, perciben y sienten la inflación los pingüinos y las nutrias del Acuario Hakone-en, al suroeste de Tokio. En un vídeo que publicó una red de noticias japonesa se puede ver que estos animales rechazan un tipo de pescado más barato del que estaban acostumbrados. Antes, el festín era jurel japonés (ha aumentado entre un 20% y un 30% desde el año pasado, según el acuario).

Ahora rechazan la comida que se pueden permitir comprar los cuidadores ante la ola de inflación y por un intento de reducir los costos. Medida que aplicaron en mayo cuando empezó la subida de los precios en el mundo.

Al respecto, según una publicación de CNN, el director del acuario, Hiroki Shimamoto, señaló que "al principio se lo llevan a la boca, pero luego deciden que no les gusta y lo dejan caer. Sienten que algo está mal".

Del jurel a la caballa

La dieta de los animales cambió del habitual aji, o jurel japonés, a un tipo de caballa más común llamado saba, que por lo visto es más grande, pero menos apetecible como se percibe en el video de All-Nippon News Network. Ahora los pingüinos apartan el pico cuando un cuidador les ofrece el pez alternativo.

Para no desperdiciar el alimento, los trabajadores del acuario tuvieron que ingeniar un método para que los animales coman los pescados. Simplemente mezclaron caballa con jurel y hubo una mayor disposición a comer de las aves y nutrias. Esta acción se podría proyectar y replicar en los miles de dueños de mascotas, como un método eficaz con los animales y sin dejarse los bolsillos vacíos en tiempos de crisis.

Otras medidas de ahorro

Según detalla CNN, el acuario también intenta abaratar costos con la reducción del número de bombas de luz, lo que les ha beneficiado en la factura de la electricidad con una bajada de un 40% y 50%.

Otra medida podría ser el aumento de la entrada al acuario, sin embargo, su director señaló que "nos gustaría hacer todo lo posible para que nuestras instalaciones sigan siendo un lugar cómodo para nuestros visitantes. No tenemos previsto aumentar el precio de la entrada".

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