
Cuando un trabajador se queda en paro, puede plantearse diferentes vías para volver a encontrar empleo. Una búsqueda activa de trabajo, echar currículum, formarse...o, por qué no, empezar su propio negocio haciéndose autónomo. En esta última alternativa tendrá derecho a una ayuda extra.
El Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) contempla la posibilidad de seguir cobrando el paro, la habitual prestación contributiva por desempleo, con la realización de un trabajo como profesional por cuenta propia. De esta forma, el autónomo tendrá esta ayuda extra en un periodo complicado, el del inicio de la actividad, en el que está expuesto a pérdidas o a ingresos por debajo de lo esperado.
Para ello, tendrá que comunicarlo en los 15 días inmediatamente posteriores al inicio de dicha actividad. El autónomo tendrá derecho a percibir el 100% de su prestación "con el descuento del IRPF, en su caso, y sin deducción de cotización a la Seguridad Social", de acuerdo con las instrucciones del SEPE.
Cuando pida esta opción, el autónomo podrá disfrutar del paro hasta un total de 270 días, es decir, nueve meses, o en caso de que le quede menos paro, hasta que dicha prestación se le agote. No podrán percibirla, eso sí, si encuentran un trabajo por cuenta ajena, ya sea a tiempo completo o en jornada parcial.
El SEPE explica que esta posibilidad también está disponible para las personas que ingresen como "socios o socias de sociedades laborales de nueva creación o socios trabajadores o socias trabajadoras de cooperativas de trabajo asociado de nueva creación".