El Gobierno no oculta ya que el gasto público se ha disparado en este tiempo del coronavirus, y eso puede acarrearles muchos problemas a la hora de elaborar un anteproyecto de Presupuestos Generales que reciba la bendición de la Unión Europea , y por ende, el Fondo de Reconstrucción que espera España.
Fuentes de Moncloa admiten que los 16.000 millones que se destinarán a las comunidades autónomas -cuyo Real Decreto Ley se aprobó este martes en Consejo de Ministros- y, el Ingreso Mínimo Vital sobrevenido y acelerado -pues su desarrollo estaba previsto en el transcurso de los cuatro años de legislatura- han engordado el gasto del Ejecutivo de tal modo, que lo que ahora procede es "adecuar" el programa de Gobierno firmado entre el Partido Socialista y Unidas Podemos, y empezar a recortar el gasto.
El Gobierno lanza un claro aviso a Pablo Iglesias para frenar sus políticas de gasto
Dicho de otro modo, que el Gobierno ha lanzado un claro aviso a Pablo Iglesias para frenar sus políticas de gasto público, "modular" el programa de coalición -en el que también se incluye la derogación de la reforma laboral-, y "adecuarse" a la situación de crisis, "repriorizando" lo prioritario, y "poniendo los pies en el suelo".
El ala socialista y economicista del Gobierno es más que consciente de que lo va a tener muy difícil para negociar Presupuestos teniendo en cuenta que la reducción del desfase público será uno de los requisitos de los fondos europeos. Y en esa tesitura, la necesidad obliga a buscar más socios que los de la investidura de Pedro Sánchez. Es decir, explorar en otros territorios más allá de la izquierda radical y los nacionalistas e independentistas, porque, la confianza en que no haya vetos, de momento, resulta insuficiente a la vista de la equidistancia entre ERC y Cs.
"El dinero público tiene que tener un objetivo claro de dar servicio, pero también de reactivar el tejido productivo"
La portavoz del Gobierno, María Jesús Montero, dijo este martes que confía en que las conclusiones a las que llegue la Comisión de la Reconstrucción Social y Económica vayan en esa línea. "El dinero público -señaló la también titular de Hacienda- tiene que tener un objetivo claro de dar servicio, pero también de reactivar el tejido productivo".
En esta clave presupuestaria en la que anda inmersa la clase política toda vez que decae el estado de alarma, el PP indicó que, solo si el PSOE se aviene a la senda del constitucionalismo y a la sensatez y se deja de aritméticas Frankenstein con Podemos y nacionalistas, cabe una posibilidad de apoyo a las Cuentas Públicas, explicó Cayetana Álvarez de Toledo.
Reparto del fondo
El Consejo de Ministros aprobó este martes el Fondo covid-19 de 16.000 millones de euros para las comunidades autónomas, con el fin de compensar los daños ocasionados en las regiones por la pandemia. Con cambios de criterio y dando ahora más peso al factor poblacional, el reparto de los fondos comenzará en julio, y se desarrollará en cuatro tramos, si bien los criterios del reparto no se conocerán hasta que no se publiquen las distintas órdenes ministeriales.
En grueso, Montero sí aclaró que los 16.000 millones del fondo se repartirán en 9.000 millones para el gasto sanitario, 2.000 para el educativo y los 5.000 restantes para paliar la pérdida de ingresos tributarios y en el transporte.
6.000 millones se repartirán en julio y los 3.000 restantes en noviembre
El principal montante del fondo serán los 9.000 millones para sanidad, de los que 6.000 millones se repartirán en julio y los 3.000 restantes en noviembre. Respecto a esa primera partida, los primeros 6.000 millones se repartirán de la siguiente forma: el 35% según la población protegida equivalente; el 30% según los ingresos en UCI, el 25% según hospitalizaciones y el 10% restante según el número de pruebas PCR.
Para el reparto de los 3.000 millones de noviembre los criterios serán: el 45% según población protegida equivalente, ingresos en UCI el 25%; el 20% según hospitalizaciones y el 10% según pruebas PCR hechas.
El único montante cuyo reparto no se había desglosado es el de los 5.000 millones, de los que ya se sabía que 800 irán para paliar la pérdida de ingresos en el transporte y 4.200 millones para mitigar la caída de ingresos tributarios. En concreto, según los datos facilitados en la conferencia de prensa, el 60% de la partida de 4.200 millones será para paliar la pérdida de ingresos por los impuestos de transmisiones y actos jurídicos documentados y por los tributos de matriculación, así como los impuestos sobre el juego (excepto el juego online). El 40% restante se repartirá según criterios de población.