Economía

Moncloa busca apoyos para unas cuentas de emergencia

  • Pedro Sánchez reconoce que el PIB se puede disparar
  • Asegura que no tiene datos objetivos para unos Presupuestos
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.

La Presidencia del Gobierno quiere contar con unos nuevos Presupuestos Generales, a los que Pedro Sánchez ha venido a calificar de reconstrucción, mientras otras fuerzas políticas, e incluso el propio jefe del Ejecutivo los han denominado ya de emergencia. En esta operación, busca los apoyos de todas las fuerzas políticas, no solo la de sus socios.

Sin embargo, admitió este martes que, aunque estas Cuentas son necesarias para solventar la crisis sobrevenida, no disponen de datos objetivos -ni tampoco otros organismos- para elaborar un cuadro macro, dada la inestabilidad e imprevisibilidad de la situación.

Sin duda, el descuadre del PIB, que se puede elevar hasta cinco puntos sobre el índice actual -saltándose el Pacto de Déficit Excesivo de la UE, por encima del 3%-, es una de las principales variables para que los indicadores económicos de los que disponía Moncloa hayan saltado por los aires. Prueba de ello es la creciente demanda de Eres y Ertes de las empresas tras la explosión de la crisis del coronavirus.

"Tenemos interés y tenemos vo-luntad de aprobarlos, pero ahora mismo no tenemos los datos para hacerlo", resumió en espíritu. El presidente remarcó que su Gobierno sigue mirando al futuro, y esos nuevos Presupuestos -de los que no llegó a verbalizar si serán los de 2020 o los de 2021- irán encaminados a reconstruir el momento social y económico, señaló.

En esa fase de reconstrucción dio a entender que espera contar con las demás fuerzas políticas, agentes sociales y la sociedad civil, algo sobre quien solo se ha pronunciado netamente a favor Cs.

Pasos inútiles

Lo que también hizo evidente el jefe del Ejecutivo es que los pasos dados hasta ahora para aprobar los Presupuestos son inútiles, ya que los objetivos aprobados gracias a la abstención de ERC, y por tanto, la luz verde de un límite de gasto no financiero -techo de gasto- de un 3,8% más, hoy por hoy podrían resultar insuficientes, si el Gobierno no prescinde de importantes partidas comprometidas con sus socios de Ggobierno e investidura.

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