
En términos de brecha salarial, las mujeres cobran 5.784 euros al año menos que los hombres y 2,2 euros menos la hora en términos de horas trabajadas, según el séptimo informe de ClosinGap "Coste de oportunidad de la brecha de género en el empleo" presentado hoy por PwC. Esta diferencia hace que el coste de oportunidad sea de 49.502 millones de euros.
A mayor edad, más se agudiza esta diferencia, que asciende al 22,5% en el grupo de 55 a 64 años. En ese sentido, el estudio también revela un indicio esperanzador de cara a los próximos años, ya que hay una menor brecha entre los grupos más jóvenes.
El impacto económico de la brecha de género en el empleo supera los 201.913 millones de euros, equivalentes al 16,8% del PIB español de 2018. De esta forma, si la tasa de empleo de la mujer se igualase a la del hombre, aumentaría la producción y supondría la creación de 2,3 millones de puestos de trabajo.
Esta escasa representación que sufre la mujer en el mercado laboral choca con los datos que afirman que hay un 5,4% más de mujeres que hombres en edad de trabajar. Esta situación tiene que ver con determinados factores como la interrupción laboral por embarazo o lactancia, las diferencias de género en la elección de estudios y profesiones, la incorporación tardía de la mujer al mercado laboral por motivos históricos -junto a la falsa corresponsabilidad en los roles familiares y domésticos- así como otras barreras sociales y culturales.
En cuanto a las jornadas laborales, la jornada parcial es más frecuente entre las mujeres, que tienen que optar por reducir su horario para dedicarse al cuidado de niños o mayores. Asimismo, el informe destaca que por cada hombre que trabaja a jornada parcial, hay 3,5 mujeres.
Además, este tipo de jornada indice en la brecha salarial con una diferencia de sueldo por hora de 1,8 euros, es decir, las mujeres cobran cerca de un 15% menos por hora que los hombres a media jornada.
Nivel de estudios
El estudio demuestra también el papel clave que tiene la educación, en especial la universitaria, para acceder a mejores condiciones laborales, tanto en cargo como en salario. En España, la proporción de mujeres de entre 25 y 64 años con estudios superiores es mayor a la de los hombres 5,2 puntos porcentuales. Sin embargo, existen diferencias significativas por género en la elección del campo de estudio. Las titulaciones STEM (Sciences, Technology, Engineering and Maths) encabezan el ranking con un ratio de 2,85 hombres por cada mujer.
Otro de los aspectos en los que la mujer también es el grupo más afectado tiene que ver con la sobrecualificación. Y es que, por cada hombre con formación universitaria que trabaja en puestos de menor rango, hay 1,12 mujeres.
Sectores
Por otro lado, el desequilibrio sectorial sigue alimentando la disparidad de géneros en el mercado laboral. Esta situación provoca que las mujeres estén más presentes en profesiones con salarios tradicionalmente más bajos, aumentando, a su vez, la brecha salarial.
Mientras los hombres se decantan por el sector primario y el secundario, las mujeres se encuentran la mayoría en el sector servicios, con una marcada brecha en las actividades del hogar, las actividades sanitarias y servicios sociales y la educación.
Brecha en el hogar
En este contexto, las mujeres trabajan 5.300 millones de horas menos al año que los hombres, es decir un 28% menos, debido a una tasa de participación laboral menos y a más contratos a tiempo parcial.
Al día, las mujeres dedican 2 horas más que los hombres al hogar y 46 minutos más al cuidado de los hijos. Además, por cada hombre inactivo por dedicarse a tareas en casa, hay casi 9 mujeres en la misma situación.