La fiscalidad de los autónomos es, desde luego, un poco más complicada que la del resto de particulares. Han de tributar no solo por el IRPF, sino también por el IVA, y presentar una serie de modelos de forma periódica en un intrincado calendario fiscal propio.
Aún así, los profesionales por cuenta propia pueden acogerse a la deducción de una serie nada desdeñable de gastos. Conocer todos estos campos es clave para ahorrar dinero a la hora de tributar por el IRPF en la declaración de la Renta, y los autónomos no siempre están al tanto de esta larga lista de posibles beneficios. Por esta razón, el portal especializado Tax Scouts ha elaborado un compendio de esos gastos que pueden dar, a la postre, un alivio frente a Hacienda.
Alquiler
Ya sea destinado para la actividad por cuenta propia o nuestro domicilio habitual, podremos deducir este gasto, aunque en el segundo caso solo en la parte proporcional en la que usemos nuestra residencia para fines laborales.
IBI, tasas de basuras...
Estos gastos, al igual que los de la comunidad de vecinos, solo se podrán deducir proporcionalmente a la cantidad de horas realizadas si trabajamos desde casa, y de forma íntegra en caso de un local destinado exclusivamente al trabajo.
Suministros
Pasa lo mismo con el alquiler: si se vive en casa solo se podrán deducir en la parte proporcional. Son los gastos por luz, agua o calefacción y se pueden deducir hasta en un 30% sobre el porcentaje de metros cuadrados usados de la casa para nuestra actividad profesional.
Teléfono e internet
Estos gastos van aparte de los anteriores. Si el autónomo trabaja en casa debe abrir líneas estrictamente profesionales; si usa las de tipo personal, no se podrán deducir los gastos.
Compras y reparaciones de bienes de inversión
Solo si cuestan más de 3.000 euros. Para el IRPF es obligatoria la amortización.
Amortizaciones
Desde Tax Scouts insisten en que hay que saber hacer bien este proceso para poder deducirse el IRPF.
Materias primas
Los materiales y materias primas necesarios para el desarollo de la actividad son considerados consumos de explotación y se pueden deducir.
Páginas web
Si necesita una página web para su actividad, tanto la creación como el mantenimiento son gastos deducibles.
Herramientas online
Si precisa de plataformas de mantenimiento o algún tipo de software, también son cantidades deducibles.
Gastos financieros
Intereses de préstamos y créditos, comisiones de tarjetas o cuentas.
Seguros
Los seguros relacionados con la actividad profesional son deducibles: de vida, seguro médico privado, de responsabilidad civil...
Cuota de autónomos
Las cuotas a la Seguridad Social de los autónomos también son gastos deducibles.
Gastos de otros trabajadores
Si contratamos a otros profesionales, hay gastos a tener cuenta: cuotas a la Seguridad Social, indemnizaciones, formación, dietas acreditadas...
Dietas
Por supuesto, también las dietas de uno mismo. Son los gastos en bares, restaurantes, hoteles...es recomendable pagar con tarjeta para un mejor registro de los gastos y atender que el límite por día es de 26,67 euros en España y 48,08 en el extranjero, cantidades que suben a 54,34 euros y 91,35 si se pernocta fuera de casa.
Desplazamientos y viajes
Se pueden deducir aquellos viajes (taxi, avión, bus, tren...) que se justifiquen como indispensables para la realización de nuestra actividad profesional.
Vehículos y gasolina
Los gastos derivados de la compra y uso de un vehículo (combustible, reparaciones, parkings, peajes...) se podrán deducir al 100% si es solo para uso laboral, y al 50% si es compartido con uso personal.
Marketing y publicidad
Estos gastos deben ser correctamente registrados y justificados como herramientas para fomentar el crecimiento de la empresa, ya sea en medios físicos o tradicionales y medios online.
Asesoría y contabilidad
Estos gastos también son deducibles para el IRPF.
Otros profesionales
En Tax Scouts incluyen a profesionales como abogados, agentes comerciales, mediadores...y también son deducibles.
Atención a clientes y proveedores
Desde Tax Scouts se reconoce que es uno de los gastos que más problemas y dudas generan, pero explican que pueden entrar los artículos de merchandising que se regalan y que, en todo caso, no pueden superar el 1% de la facturación total del negocio.