
Abertis venderá Eurotoll, su filial dedicada a soluciones de peaje electrónico para vehículos pesados que presta servicios en Europa. El grupo propiedad de Atlantia y ACS ha contratado para pilotar la operación como asesor financiero al banco francés Natixis, según indican fuentes conocedoras del proceso.
La compañía, que declinó hacer comentarios, ya ha recibido las primeras ofertas indicativas por parte de empresas europeas como la francesa Egis, las italianas Mooney, controlada por el fondo estadounidense CVC y participada por la entidad transalpina Intesa Sanpaolo, y Telepass, filial precisamente de Atlantia; la alemana DKV Mobility, propiedad de la aseguradora DKV y que en España es accionista de control de VatServices, y la portuguesa Via Verde, cuya dueña es Brisa. El calendario previsto es que las empresas finalistas presenten sus propuestas vinculantes en abril.
Cuenta con un centenar de socios de toda Europa que operan en una red de 92.000 kilómetros, habiendo proporcionado ya 160.000 dispositivos de pago de peaje electrónico
Eurotoll está integrada desde 2017 en Abertis Mobility Services, la división de servicios de tecnología del grupo español. Previamente, la sociedad formaba parte del perímetro de la francesa Sanef, también controlada por Abertis. De hecho, la sede de la empresa está ubicada en Francia. Está especializada en soluciones de peaje electrónico B2B de Europa. Cuenta con un centenar de socios de toda Europa que operan en una red de 92.000 kilómetros, habiendo proporcionado ya 160.000 dispositivos de pago de peaje electrónico. Suma alrededor de 10.000 clientes y el volumen de pagos que gestiona alcanza los 600 millones de euros anuales, según la información pública de la firma. Su presencia, directa o a través de distribuidores, se extiende a 27 países: España, Portugal, Francia, Reino Unido, Irlanda, Bélgica, Países Bajos, Luxemburgo, Alemania, Italia, Suiza, Mónaco, Austria, República Checa, Polonia, Eslovaquia, Hungría -donde cuenta con una filial-, Eslovenia, Rumanía, Moldavia, Bulgaria, Macedonia, Grecia, Turquía, Dinamarca, Suecia y Estonia.
La filial de Abertis, que tiene el 100% del capital, permite a los vehículos pesados que dispongan del producto Tribox Air viajar con un mismo dispositivo de pago de peaje electrónico en las autopistas de varios países europeos, entre los que figuran España, Francia, Portugal, Austria y Bélgica. Los clientes de Eurotoll se pueden beneficiar además del seguimiento diario de sus datos de peaje: alertas en tiempo real, gestión de flotas, gestión de reclamaciones, descuentos o informes personalizados.
Con Eurotoll, Abertis ha buscado impulsar el desarrollo de un negocio de gestión de pago de peaje electrónico para vehículos pesados que es complementario a las concesiones de peaje. Sin embargo, la compañía ha decidido ahora desinvertir en la sociedad. Sigue los pasos que dio hace unos meses su accionista de control, Atlantia, con la entrada en el capital de su filial Telepass del fondo de inversión Partners Group, que tomó un 49% por más de 1.000 millones de euros. Lo hace, además, en un momento en el que sobre la mesa del Gobierno de España está la futura implantación del pago por uso en la red de carreteras de alta capacidad. Una oportunidad sobre la que se ciernen grandes incógnitas para el sector privado, puesto que la posición del Ejecutivo discurre más por que la gestión del sistema corra a cargo de la pública Seittsa.
Prevé ahorrar 173 millones en Francia, Chile y España con su nuevo plan de eficiencias
Abertis Mobility Services tiene bajo su paraguas, además de Eurotoll, a Emovis, dedicada al desarrollo y gestión de tecnología y servicios de información para ofrecer soluciones de peaje electrónico y movilidad inteligente en el mundo. La firma opera algunas de las infraestructuras de peaje free flow (sin barreras) más transitadas del mundo, en Reino Unido, Irlanda, Canadá y Puerto Rico.
Emovis encaja en el plan estratégico 2022-2024 que Abertis aprobó en 2021, como adelantó este diario. Esta hoja de ruta se sustenta sobre tres pilares: plataforma de crecimiento, excelencia operativa y sostenibilidad e innovación. En primer término, la compañía aspira a consolidarse en los países en los que está presente, con el foco en Europa y Norteamérica, y espera participar con nuevos proyectos, así como en ampliaciones de las concesiones en cartera a cambio de nuevas inversiones. No obstante, también está abierta a entrar en nuevos mercados y continuará centrada en su crecimiento internacional, "a través de la búsqueda de nuevas oportunidades de adquisición de activos", según señala en su memoria anual. En España las oportunidades son mucho más limitadas, pero la firma se halla en estos momentos en la única que ofrece el mercado, la subasta para adquirir Ausur, operadora de la AP-7 Alicante-Cartagena, a Pralesa y Grupo Fuertes.
En cuanto a la excelencia operativa, Abertis seguirá trabajando en la adaptación de las infraestructuras, la transición del peaje tradicional al peaje sin barreras free flow y en el desarrollo de la tecnología ITS que permita la información en tiempo real del estado de las carreteras. La multinacional española afronta el desafío de adaptar las autopistas a la movilidad inteligente para acoger a los vehículos eléctricos, compartidos y conectados. De igual modo, dentro de su estrategia ha definido su cuarto plan de eficiencias con el que ahondar en las sinergias y maximizar la generación de flujo de caja. Centrado principalmente en Francia, España y Chile, prevé unos ahorros acumulados de 173 millones. Dentro de la sostenibilidad, priorizará hasta 2022 los objetivos de descarbonización, economía circular, seguridad vial, seguridad ocupaciones, igualdad de género y ciberseguridad.
Con Eurotoll la compañía da un paso más en su plan de desinversiones
Abertis continúa así desinvirtiendo en activos no estratégicos. En 2021, la compañía que dirige José Aljaro vendió el 35% de la concesionaria gala Alienor y el 100% de la operadora de la autopista Sanef Aquitaine, a Eiffage por 223,4 millones de euros; el 33,33% de la británica Road Management Group (RMG) a InfraRed por 36,8 millones de euros; y el 5,44% de la Autopista del Brebemi, en Italia.
Relacionados
- ACS planea comprar el 20% de Hochtief en Abertis y nombrará un CEO
- El Gobierno pagará 1.070 millones a Abertis por el fin de los peajes en la AP-7 y la AP-2
- Abertis quiere recuperar peso en España a la espera del pago por uso
- Abertis se disputa con cinco fondos la compra a Pralesa y Fuertes de Ausur