
Wallbox inauguró este miércoles su nueva fábrica en la Zona Franca de Barcelona, con 200 empleados y una capacidad de producción de 750.000 cargadores de vehículo eléctrico anuales, cifra que prevé elevar hasta los 520 trabajadores y un millón de cargadores al año en 2025, cuando opere a pleno rendimiento.
La planta de Barcelona, que ha requerido una inversión de 9 millones de euros, supone ganar capacidad productiva frente a las primeras instalaciones abiertas por la compañía en Sant Andreu de la Barca (Barcelona). Dispone de cuatro líneas automatizadas y diseñadas para que un cliente reciba su cargador (monta siete modelos diferentes) en 72 horas.
Además, este año se sumarán nuevas factorías en Estados Unidos y China, para dar cobertura de proximidad a todo el mundo, teniendo en cuenta que Wallbox vende ya sus cargadores a casi un centenar de países.
La firma catalana, fundada en 2015 y que el año pasado empezó a cotizar en la bolsa de Nueva York, tiene entre sus inversores a Iberdrola, que con motivo de la inauguración de la planta de Barcelona anunció que comprará 10.000 cargadores de Wallbox.
Estas instalaciones, ubicadas en unos terrenos alquilados al Consorcio de la Zona Franca de Barcelona durante una década, no solo disponen de espacio productivo, sino también logístico, de oficinas y de I+D. Asimismo, se llenarán las cubiertas de paneles solares, de forma que, para finales de año, entre el 30% y el 60% de las necesidades energéticas de producción se atenderán con autoconsumo.
Respecto al laboratorio de la Zona Franca, será el tercero de la compañía, tras el de la sede de Barcelona y el de California, desde los que desarrolla tanto sus productos como las herramientas de validación de los cargadores y su compatibilidad con los distintos fabricantes de vehículos eléctricos. Solo en I+D, Wallbox invirtió 12 millones de euros en 2021.
La inauguración de la Zona Franca contó con la asistencia de gran número de autoridades, aunque finalmente no acudió el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, como estaba previsto inicialmente.
Sí que estuvo presente la ministra de Industria, Reyes Maroto, así como el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, y las alcaldesas de Barcelona y de L'Hospitalet, Ada Colau y Núria Marín, respectivamente. También participó el presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán.