
El grupo belga de automoción Punch y la empresa de soluciones de almacenaje Mecalux han reaparecido en la comisión de reindustrialización de Nissan en Barcelona como proyectos complementarios al del hub de descarbonización de QEV Technologies, una vez que se ha constatado que no ocupará todo el terreno de la Zona Franca.
En la misma reunión, se ha descartado la propuesta de reparación y mantenimiento de vehículos militares que puso el Gobierno sobre la mesa, pero que la Generalitat rechazó de plano.
En cualquier caso, tanto desde la administración central como la autonómica han asegurado que los 1.500 trabajadores de Nissan que esperan nuevo empleador tendrán un puesto de trabajo sea cual sea la solución final para las instalaciones.
La mayor incertidumbre se da en la parcela más grande, la de Zona Franca, mientras que las conversaciones avanzan "a muy buen ritmo" con QEV Technologies para el centro de Sant Andreu de la Barca y con Silence para Montcada i Reixac, según un comunicado de la comisión de reindustrialización.
La reunión de este viernes se ha producido tras la confirmación esta semana por parte de la compañía china Great Wall Motor (GWM) de no continuar en el proceso de negociación debido a una reorientación de su estrategia de implantación en Europa, mientras que Punch ha manifestado de nuevo su interés en entrar en el proceso de reindustrialización con la revisión de su proyecto inicial.
Los miembros de la comisión han solicitado a la mesa retomar las conversaciones con Punch para clarificar su nueva propuesta y estudiar si puede ser complementaria al hub liderado por QEV Technologies como solución para la planta de Zona Franca.
Los comités de empresa de Nissan han agregado que también se analizará una propuesta industrial de Mecalux, además de propuestas logísticas, si bien insisten en que deben buscarse proyectos industriales para las instalaciones de Nissan y no de tipo logístico, ya que "garantizan una mayor estabilidad laboral, generan empleo de mayor calidad y son la mejor opción para garantizar el empleo de la cadena de empresas proveedoras y auxiliares de Nissan".
Asimismo, han lamentado que se haya retirado la propuesta militar "antes de poder analizar sus posibilidades", por lo que los comités de empresa de Nissan creen que la decisión "responde más a un tema político que industrial".
Desde el Grupo Punch, han indicado a elEconomista: "Confirmamos que mantenemos intacto nuestro interés en el proyecto de reindustrializacion de la planta de Nissan en Barcelona, que podría salvaguardar puestos de trabajo y la base actual de proveedores".
"Nuestra propuesta actualizada permitiría encontrar una solución que pueda resultar útil para todas las partes interesadas, incluido el hub liderado por QEV Technologies", han agregado. Desde Mecalux todavía no se han pronunciado públicamente respecto a su propuesta.