Branded Content

No te compliques: invierte en algo que puedas tocar

  • La ONU ha advertido del riesgo de una recesión global
  • Ofrecido por Urbanitae
Madridicon-related

Si estás leyendo estas líneas, te preocupa tu dinero (¿y a quién no?). Es comprensible. La década de los 2020 ha hecho bueno el dicho: es difícil hacer predicciones, especialmente sobre el futuro. No hay más que ver cómo ve el FMI lo que queda de año: "sombrío y más incierto". Y entretanto, la pregunta de qué hacer con nuestros ahorros se vuelve más apremiante.

No es fácil orientarse en estos tiempos. La economía parece amenazada desde diferentes flancos, que se resumen en uno: la inflación. El problema empezó en 2021, aunque no está muy claro por qué. Los estímulos masivos aplicados durante la pandemia, los problemas en las cadenas de suministro y la crisis energética -que también comenzó el año pasado- son sospechosos habituales.

Mientras tanto, la respuesta generalizada a este fenómeno, la subida de tipos de interés, tiene sus propios inconvenientes. El primero, que frena el crecimiento. La OCDE estima que la economía global será este año al menos 2,8 billones de dólares más pequeña de lo que debería. El año que viene crecerá menos aún, un 2,2%. Hasta la ONU ha advertido del riesgo de recesión global que lleva aparejado el endurecimiento de la política monetaria.

El resultado de todo esto es la volatilidad. Es la palabra de moda entre bonistas, inversores y ministros de Economía. El comportamiento de los mercados está siendo peor de lo esperado y eso se refleja en los vaivenes de la Bolsa. El conocido índice VIX, que mide la volatilidad esperada según una serie de opciones del índice S&P 500, volvió a superar los 30 puntos a finales de septiembre. De las criptomonedas, mejor no hablamos.

Aíslate de las turbulencias

Puede que la inflación ya esté en el camino de bajada, pero pocos creen que volveremos a niveles bajos antes de 2024. Mientras, ¿cómo ponemos a salvo nuestros ahorros? Por suerte, hay sectores menos vulnerables a las turbulencias del mercado. En España, el ejemplo clásico es el ladrillo. Es fácil entender por qué. Una casa es un activo real, tangible, con un valor intrínseco: nos resultan imprescindibles, pase lo que pase con el PIB.

Es bueno saber que no hay que hipotecarse para invertir en vivienda -sobre todo, tal y como está el euríbor-. Propuestas como la de Urbanitae permiten a cualquiera convertirse en copropietario de promociones enteras desde solo 500 euros. ¿Cómo? En lugar de comprar un piso con la ayuda de un amigo o un familiar, te juntas con cientos de inversores como tú. Y te olvidas de trámites, préstamos y gestiones engorrosas.

Antes de que tu escepticismo te lleve a cerrar esta página, recordaremos que no hay inversiones sin riesgo Y, aunque el inmobiliario está demostrando su resistencia, no es del todo inmune a los ciclos económicos. Pero los datos son esperanzadores. Este año será uno de los mejores de la historia para el mercado residencial. En 2023, es casi seguro que las compraventas caerán a niveles más cercanos a la media.

Rentabilidad anual de doble dígito

Pero la demanda es sólida y el stock de vivienda nueva sigue reduciéndose. Todo ello apunta a que los precios de la vivienda se moderarán... pero seguirán estables. Urbanitae ya ha promovido el desarrollo de más de 1.100 viviendas en toda España, de la mano de promotores de la talla de Inmobiliaria Espacio o Gestilar. Gracias a las aportaciones de todo tipo de inversores ha financiado cerca de 87 millones de euros en más de 60 proyectos.

La mayoría de los proyectos son promociones residenciales de obra nueva que aún están en curso. Pero las 13 que ya han finalizado han ido bastante bien, teniendo en cuenta que la pandemia y los costes de construcción les han afectado. Más de 1.000 inversores ya han comprobado los resultados de invertir con Urbanitae: han recibido su dinero con una rentabilidad anual media próxima al 17%.

No es de extrañar. El inmobiliario se considera un valor refugio y los grandes inversores lo saben. Con opciones como Urbanitae, los pequeños también pueden participar... sin costes ni papeleos. Así que, ya sabes: si no lo ves claro, invierte en algo que puedas tocar.

REALIZADO POR ECOBRANDS

Este contenido ha sido elaborado por EcoBrands, unidad de Branded Content de elEconomista.es

WhatsAppFacebookTwitterLinkedinBeloudBluesky