
Desde el mismo momento en el que Unicaja puso un pie sobre el parqué corrió como la pólvora el rumor de que la entidad iba a ser objeto de deseo de grandes entidades nacionales, a tiro de OPA. Esta teoría justificaba hace menos de año y medio el multiplicador de beneficios al que cotizaba la compañía, parejo al que se pagaba entonces por Bankinter que, tradicionalmente, siempre ha cotizado a ratios mucho más elevadas que sus comparables. Pero con el paso del tiempo los tambores de OPA que sonaban con fuerza antes han dejado de hacerlo casi por completo ante el retraso de la subida de tipos de interés en la eurozona que tanto beneficiaría a la banca española.
Uno de los grandes gestores de fondos de inversión españoles que en su salida a bolsa decidió jugar la baza de una OPA asegura hoy que ha dejado de "contemplar este escenario". "No veo una operación corporativa en el corto plazo, pero tampoco veo a Unicaja ser capaz de sobrevivir sola en el largo plazo. Las posibilidades son muy bajas. A día de hoy tiene suficiente capital, pero tiene un problema y es que genera poca rentabilidad que en un escenario de tipos repuntaría", afirma.
Desde la reunión del pasado 14 de junio en la que el Banco Central Europeo (BCE) anunció que no subiría tipos "al menos hasta después del verano de 2019", la prima con la que cotizaba Unicaja respecto al sector nacional antes de las palabras de Draghi se ha reducido en un 45%. El inversor de la entidad presidida por Manuel Azuaga ha pasado de comprar acciones con un PER (número de veces que queda recogido el beneficio esperado en el precio de los títulos) de 14,6 veces, un 26,3% por encima de la media del resto de bancos españoles, a hacerlo a menos de 13 veces, un 14% superior a cómo cotiza el resto de entidades hoy en día, en pleno desplome motivado por la crisis de deuda italiana.
A pesar de que Unicaja es la OPV más rentable de los dos últimos años, con una subida del 23,6%. Sin embargo, desde la reunión del BCE en junio, la ex caja andaluza es la segunda entidad que pierde más valor en bolsa -por detrás de BBVA- al caer un 12,6%, hasta los 1,36 euros del cierre del miércoles. El mercado considera que Unicaja se encontrará entre las grandes beneficiadas de un futuro incremento del precio del dinero en la eurozona, además de otras entidades como CaixaBank y Bankia, ante su gran carga hipotecaria respecto al total de la cartera de préstamos.
"Tienen que darse las circunstancias adecuadas para que se retome un contexto de OPAs. Se producen cuando hay alegría en el mercado y no es algo que exista ahora, con las cuentas de la banca presionadas por los bajos tipos de interés", reconoce otro importante gestor value nacional que decidió vender Unicaja aprovechando la subida que había protagonizado desde la OPV.
Mientras el mercado no vuelva -como hizo ya a finales de 2017- a reconocer el valor en libros de la banca española, afirman estas mismas fuentes, la fusión o compra de Unicaja tendrá que esperar. "Una compra por parte de CaixaBank tiene sentido estratégico y cultural porque contaría con una participación en la fundación" y Unicaja no hay que olvidar que podría seguir los pasos de Criteria en Caixa y rebajar su participación -hoy en el 49,68%- por debajo de la barrera del 40% para contentar a Bruselas. La opción de Ibercaja tampoco se descarta, lo que permitiría a la entidad diluir el peso de su fundación sin necesidad de salir a bolsa, algo que debería hacer antes de 2020 y que llevan años retrasando en el tiempo.