
Gloria Ortiz fue nombrada consejera delegada de Bankinter en marzo pasado y en escasos seis meses la entidad ha adoptado varias decisiones de calado como integrar EVO Banco y convertir la financiera de Irlanda en banco para dar un servicio universal. Conoce como pocos el grupo que pilota. Desde que llegó en 2001, ha encadenado responsabilidades en casi todas sus áreas. Estrenó cargo en un momento dulce, con resultados en máximos, y le tocará lidiar el escenario de tipos a la baja. Cree que el 15% de rentabilidad será el suelo para Bankinter y desliza la disposición de entrar en otros países de la zona euro si encuentra oportunidades.
¿Por qué se pierde el interés en mantener EVO Banco independiente?
EVO se adquiere en el 2019, junto con AvantCard, y queríamos probar varias cosas. Bankinter está muy centrado en el segmento de renta media- alta y muy especializado en banca privada; y queríamos probar si era posible crecer en el mercado de masas, donde tenemos un gran potencial porque nuestra cuota es muy pequeña. El objetivo era ponerlo en números verdes y probar que, con una oferta simple y totalmente digital, éramos capaces de crecer de manera rentable. Consiguió el breakeven el año pasado y la siguiente fase era alcanzar un RoE (rentabilidad sobre recursos propios) que se exigía al resto de negocios, por encima del coste de capital. Pero nos dimos cuenta de que necesitábamos crecimientos muy altos y que íbamos a tardar muchos años. La opción que mejores resultados nos daba era juntar los dos mundos, es decir, la capacidad digital que tiene EVO con la escalabilidad mayor de Bankinter y su capacidad de rentabilizar a los clientes.
En Irlanda escalarán de financiera a banco. ¿Cuál es su hoja de ruta?
La idea es hacer con Bankinter en Irlanda lo que hemos hecho en Portugal, solo que allí compramos un banco entero con capacidades en prácticamente todos los segmentos. En Irlanda partimos de una oferta simple y le añadiremos capas con la ambición de tener un banco completo. Empezaremos por los depósitos por su menor complejidad y creo que estaremos en disposición este verano de estar ofreciendo los primeros, y después, para final de 2025 las cuentas corrientes, que son el core de cualquier banco. Y a partir de ahí, en función de las oportunidades que veamos en otros segmentos, iremos completando la propuesta de valor, con gestión de activos, banca privada, banca de empresas... Pero eso va a tardar. Los segmentos más fáciles a primera vista parecen ser banca corporativa y banca privada.
Portugal e Irlanda representan un 15% de los ingresos totales. ¿Tiene la ambición de elevar el porcentaje?
Creo que deberíamos llegar a un 20% en tres-cinco años, sin duda. Y, ¿por qué no?, a más plazo, ir aumentando incluso al 30%, sin renunciar a nada en la agenda. Entramos en Portugal en un momento en que vimos que había una disrupción competitiva y vimos una oportunidad de entrada. En Irlanda ocurrió exactamente lo mismo. Si en la zona euro o en Europa zona no euro, vemos oportunidades, es decir, mercados donde creamos que podemos aportar y crecer de manera rentable, aprovecharemos la oportunidad.
¿Qué mercados le encajarían?
Estoy centrando el tiro en zona euro porque la legislación es compartida, la divisa es la misma, el regulador y supervisor es el mismo y nos vemos en un terreno que conocemos. Los países europeos fuera de la zona euro podrían ser una segunda opción, en función de la legislación y la oportunidad. No hay nada en agenda y no tengo puesto la diana en ninguno. Rastreamos continuamente, pero por ahora tenemos bastante en el plato y podemos estar tranquilos durante unos cuantos meses.
¿Su apetito incluye añadir piezas para ganar escala en los países en los que ya tienen presencia?
En principio no. Nuestra estrategia de crecimiento es orgánica y en España lo habéis visto: nos hemos mantenido independientes. Nosotros crecemos de manera inorgánica allí donde no tenemos las capacidades para hacerlo orgánicamente porque el proceso de establecerte desde cero es larguísimo y muy difícil.
En España ¿lo descartan por completo?
En España todavía tenemos mucha oportunidad de crecimiento. De hecho, se ve que año tras año estamos creciendo en prácticamente todos los negocios. En banca privada crecemos a doble dígito en todo lo que tiene que ver con asesoramiento y gestión de carteras. Somos la única entidad que ha crecido en crédito en empresas en los últimos años... Todavía tenemos mucho que decir y no necesitamos entrar en una dinámica de reducción de costes para conseguir mantener la rentabilidad. Con lo cual, no. En España vamos a seguir en solitario.
El beneficio de Bankinter superaba en septiembre los 730 millones. Una simple extrapolación lleva la cifra cerca o por encima de los 1.000 millones a final de año. ¿Lo veremos así?
Va a estar muy complicado porque las extrapolaciones no funcionan así. Pero soy muy optimista. Van a ser, de nuevo, resultados de récord.
En rentabilidad la banca española está muy bien posicionada en Europa. ¿Qué nivel considera sostenible?
Es muy complicado decir qué nivel es sostenible porque la banca depende muchísimo de los tipos de interés. Si no cuentas con un negocio de comisiones fuerte, un negocio de gestión de activos, de asesoramiento o internacional, es decir, esos negocios que generan valor más allá de lo que es el mero crédito, puedes tener una merma importante de la rentabilidad. Pero en entornos normalizados de tipos del 2-2,5%, los RoEs pueden estar perfectamente entorno al 15%, por encima del coste de capital.
Hablamos de Bankinter, ¿verdad?
Hablamos de Bankinter y de cualquier negocio que esté diversificado y que tenga un peso de negocio de comisiones fuerte.
Con la caída de tipos, se ha intensificado la guerra en determinados nichos de mercados como las hipotecas. ¿Son sostenibles o se están estrechando en exceso los márgenes?
No me gusta hablar de guerra, pero es verdad que el mercado hipotecario español siempre ha sido muy competitivo y se ajusta muy rápido a los entornos de tipos de interés, sobre todo a la baja. Depende del perfil de riesgo de tipo de interés que quieras asumir, que no es muy recomendable asumir mucho, pero no veo sostenible bajar mucho más los precios, excepto que seas capaz de rentabilizar al cliente y de vincularlo.
El consejero delegado de Generali se ha declarado abierto a explorar la alianza que tenía Liberty con Bankinter. ¿Existe esa disponibilidad también por su parte?
Firmamos con Liberty un acuerdo que tenía unas fechas y unos condicionamientos. Lo que ocurrió es que se nos cruzó la operación corporativa con Generali y esos tiempos en el contrato vencieron. Entre tanto, cambió mucho el mercado. Pilla entre medias la subida de tipos del BCE y la crisis de inflación que ha tenido el negocio asegurador en esos últimos meses. No es el mejor momento de poner en venta ningún negocio de seguros generales. Nos sentimos muy a gusto con tener varias ofertas en el negocio de mediación de seguros. No nos cerramos a nada, pero, por el momento, creo que toca que el sector absorba la crisis de siniestralidad alta y de inflación que ha deteriorado tanto la rentabilidad y que se normalicen los tipos también.
¿Ofrecerán servicios de criptomonedas como otros competidores?
No. Los criptoactivos no tienen valor intrínseco, son altamente especulativos y no están regulados. Hemos aprendido la lección en el pasado con activos que sí sabíamos lo que eran y que más o menos sabíamos valorar, pero que tenían riesgos a veces muy lejanos, como los bonos islandeses. ¿Quién pensaba que Islandia iba a quebrar? Creo que no debemos ofrecer a los clientes activos que no entendemos bien y que ni sabemos valorar, por mucho que algún cliente lo demande.
¿Recurrirán el nuevo impuesto?
Por ahora no tenemos el texto definitivo. Nos han llegado muchos, muy variados y con distintas implicaciones. Hasta que no lo vea publicado en el BOE y hagamos el análisis profundo legal sobre el impuesto, no puedo decir si lo vamos a recurrir o no. Pero sí adelanto que si el impuesto no se atiene a lo que nosotros consideramos que es la legalidad, lo recurriremos. El Consejo del banco tiene la obligación de velar por los derechos de los accionistas. Si hay algo que está mermando la rentabilidad del banco y que es ilegal, nuestra obligación es recurrirlo.
El Gobernador del Banco de España, José Luis Escrivá, pide que su diseño garantice la neutralidad del tributo sobre los negocios. ¿Es viable?
Lo que está diciendo nuestro Gobernador es que no puedes poner un tributo en los ingresos. En un banco, los ingresos, que serían el margen bruto, dependen del riesgo que asumas. La maquinaria de recuperación para un préstamo de consumo no es la misma que para una hipoteca. Más que nada por el volumen que cae en moroso. Una parte de los costes operativos son de explotación, sin los cuales no es posible tener el banco vivo y deberían ser tenidos en cuenta. El tipo de interés en una hipoteca es uno porque el riesgo es bajo y tiene una garantía, mientras que en consumo el tipo es otro porque el riesgo es alto y no tiene garantía. Sin embargo, lo que va a ocurrir es que el banco que se dedique más a consumo tendrá los mismos costes de riesgo y pagará más en impuesto.
Por tanto, ¿la neutralidad solo se garantizaría si el tributo se aplicara sobre el beneficio? Sí.
¿Le convencen ideas como fijar exenciones en dicho tributo de negocios como hipotecas para jóvenes o pueden distorsionar el mercado? Cuando asignas capital a los negocios, lo que haces es ver la rentabilidad sobre el capital que te da ese negocio. Lo que ocurre es que ese negocio, como puede ser la hipoteca para jóvenes, que es estrechísimo, sobre el papel será más rentable que otro. Pero ¿por qué no las pymes? ¿Por qué las moratorias que vamos a dar en la dana no están eximidas? ¿Dónde pones la línea? Lo que sí están muy bien tirados son los avales del ICO para jóvenes porque les va a permitir el acceso a hipotecas.
¿Por qué cree que el Gobierno no escucha al sector?
No es que no escuche, es que no nos consulta tampoco.
La fragilidad del Gobierno hace que cada vez que tiene que sacar algo adelante deba hacer cesiones que no necesariamente responden al interés general de todo el país. Lo vimos con el tira y afloja de Junts en los Presupuestos. ¿Es bueno para el país esta tensión permanente?
No me gusta opinar de política, pero en este caso te diré, porque es obvio, que no es bueno. Creo que no salen buenas soluciones cuando tienes que ceder una cosa y la contraria. Lo que te lleva es a soluciones incompletas, parciales y en algunos casos malas; el impuesto a la banca es un ejemplo. Desde la gran crisis financiera, se ha producido una polarización que no es buena. Y no solo en España. Lo ves en Francia y en general en todos los países occidentales. En política creo que hemos perdido la buena costumbre de mirar por los intereses del país y a veces hay que juntarse todos porque hay problemas, como las pensiones, que son de país y los tenemos que afrontar como país. Eso parece imposible ya.
Nueva organización digital
Bankinter integrará EVO Banco para potenciar las sinergias entre ambos mundos: la filial online dará capacidades, experiencia y ritmo en digitalización y la matriz el pulmón y estructura para acelerar la penetración en el negocio de banca retail o más de masa. Con los recursos y equipo de la filial online, el banco construye una "organización digital" que se suma a las once territoriales con las que opera el negocio por geografías. El movimiento esconde el ambicioso objetivo de convertirla en punta de lanza para penetrar el mercado: "Creemos que podemos estar creciendo a doble dígito en organización digital a partir del primer año, en clientes y recursos típicos. La máquina de captación de clientes a partir de 2026 tiene que ser, claramente, la organización digital", desveló Ortiz.
La base de partida son unos 400.000 clientes activos: 330.000 aportados por Evo Banco y 70.000-80.000 de la oficina digital de Bankinter. La entidad compró EVO Banco en 2019 al fondo Apollo junto a la financiera Avant sobre la que está construyendo, precisamente, la franquicia de banca global en Irlanda. Su cartera de usuarios es joven en su mayoría y el plan pasa por enriquecer además la propuesta para ir creciendo con el cliente también en negocio. "En EVO muchas de las captaciones son clientes jóvenes, que hoy tienen unas necesidades pero a lo largo de su vida van a tener otras. Mejoraremos en propuesta de valor a esos clientes", explicó la banquera.
"La oficina digital -agregó- es una organización completa y tiene incluso un centro de banca privada. Va a ser una organización con el foco de captación en mercado de masas pero tendrá todos los segmentos de personas físicas." Ante la pregunta de si desaparecerán los precios más competitivos de un banco online, garantiza que las propuestas atractivas: "La organización digital seguirá teniendo productos diferenciados con ofertas diferenciadas de precio y reflejar en ellos el menor coste de estructura que tiene una estructura digital con respecto a una organización que tiene oficinas. Tendremos mayor capacidad para negociar precios, incluso en la organización digital".
Opa de BBVA sobre Sabadell
La opa de BBVA sobre Sabadell transciende a la pugna entre ambos porque han escalado la ofensiva comercial para decantar la opa hacia a su lado. "Son dos bancos fuertes que, cuando se ponen a competir, hacen daño, lógicamente. Están ahí en el mercado dando guerra, como siempre", admite. A futuro, sin embargo, y si se cumplen los precedentes de otras fusiones sí espera oportunidades, que Bankinter siempre ha sabido aprovechar porque, cuando se están ejecutando, "hay mucha incertidumbre, tanto en los propios empleados como en los clientes, y suele haber merma en la calidad de servicio, sobre todo con los clientes del banco absorbido, por lo general".
Admite que la oportunidad puede llegar particularmente en el segmento de empresas, "incluso de cierto tamaño porque las empresas tienen que diversificar sus fuentes de financiación, por lo tanto necesitan tener un pool bancario nutrido. Los que estaban operando con BBVA, Sabadell y con Caixa se podrían encontrar solo con dos bancos y deberán buscar un tercero. Nosotros vamos a estar allí para crecer con calidad y de manera rentable".
Ante la consulta de si la tendencia de la consolidación se activará con la bajada de tipos, reflexiona: "A escala nacional tenemos la opa del BBVA sobre Sabadell. Son procesos muy largos y hay muchas piedras por el camino, no sé si saldrá o no. Creo que ahora mismo la rentabilidad que tienen los bancos y las cajas hacen que nadie, por necesidad, vaya a buscar fusiones".
Tampoco ve "muchos movimientos" en Europa, al margen de la doble ofensiva de Andrea Orcel -CEO de UniCredit- sobre Commerzbank y el italiano BPM. "La banca es un sector muy regulado y supervisado. Los procesos de fusión son muy largos. Se genera muchísima incertidumbre", señala. Observa "más voluntad" a nivel de las instituciones europeas para impulsar la consolidación, pero subraya que" la realidad es tozuda: ningún país quiere perder soberanía sobre sus principales bancos".