Día clave en la operación BBVA - Sabadell. Menos de una semana después de que el consejo de administración de la catalana recibiese una oferta por escrito de la entidad que encabezan Carlos Torres y Onur Genç llega la primera fecha marcada en el calendario de este movimiento clave para el sector financiero español: la reunión del consejo de administración de Sabadell que pondrá sobre la mesa las primeras valoraciones al respecto de la oferta que conocieron el pasado martes y que se producirá este mismo lunes, tal y como ha podido saber elEconomista.es.
Tras varios días de reflexión y los movimientos de varios de los fondos accionistas de esta entidad para con el consejo y la cúpula del banco, fuentes financieras señalan a elEconomista.es que en el consejo se dan dos sensibilidades.
Una parte de los máximos representantes de la entidad prefiere rechazar el interés de BBVA y apostar por un Sabadell independiente, en la convicción de su potencial de crecimiento y por no haber sacado el máximo provecho a su reenfoque estratégico, y para evitar también nuevos ajustes en la plantilla.
Otra parte juzga que la oferta no refleja el valor y las proyecciones de la entidad, pero se inclina por entablar conversaciones con el grupo vasco, considerando que su propuesta puede ser un punto de partida para una contraoferta que encaje mejor con la situación actual del Sabadell.

En este sentido, y como ya publicó este medio, diferentes voces del mercado apuntan a que una oferta con una parte en acciones y otra en efectivo tendría mejor encaje en las aspiraciones de los accionistas de la entidad catalana que la ahora planteada.
Prima del 30% diluida
El planteamiento hecho público por BBVA es entregar un título suyo de nueva emisión por cada 4,83 de Sabadell, incluyendo en la valoración una prima próxima al 30% en las cotizaciones que ambos bancos tenían el lunes pasado, víspera de filtrarse el interés del grupo vasco, y que ha menguado con la posterior evolución de las acciones en bolsa.
Precisamente, el distanciamiento en la valoración fue lo que frustró en 2020 que la fusión cuajase, junto a los dos sillones que propuso al Sabadell en el consejo, ambos sin rango ejecutivo. La nueva propuesta eleva a tres los consejeros, uno de ellos para ocupar la vicepresidencia.
En el lado de Sabadell se juzga igualmente insuficiente por, sobre todo, pretender que no hay reparto de poder y que BBVA cope todos los puestos ejecutivos, además de la cúpula.
La operación planteada por BBVA vía canje de acciones precisa ampliar en un 20% su capital y el grupo calcula que permitiría aumentar el beneficio por acción (BPA) para alrededor del 3,5% desde el primer año de la fusión. Una emisión superior de títulos erosionaría o diluiría dicho rédito, pero expertos consultados por elEconomista.es ven margen para mejorar la propuesta por la vía de incluir una parte del pago en efectivo como demandaría el consejo del banco catalán tras analizar la primera propuesta.
El grupo presidido por Torres tiene hucha en solvencia excedentaria. Su capital CET1 alcanzaba en marzo el 12,82% frente al 11,5-12% marcado como objetivo, y esos 82 puntos básicos de más equivalen a una red extra de solvencia cercana a los 3.100 millones.
La ofensiva tiene lugar después del fulgurante rally experimentado por BBVA en bolsa, con una capitalización que triplica los 23.300 millones que valía cuando naufragaron sus pretensiones de unión en 2022. Los más de 12.000 millones estimados en la oferta multiplican a su vez por casi cinco veces el valor del Sabadell, inferior entonces a los 2.500 millones.
Sin embargo, el abordaje de BBVA llega sin que el banco catalán haya recuperado el valor en libros, con el potencial aprovechamiento de fondos de comercio que ello implica y al margen del recorrido al alza que pueda tener o no la cotización.
La cúpula de BBVA siempre ha supeditado cualquier operación al encaje industrial y que den los números. Sabadell refuerza su posición en España, con cuotas privilegiadas en negocios claves como pymes y empresas, frente a un balance más potente en banca retail e hipotecas del banco azul, pero además le da posición en Reino Unido, ayudando a reducir su dependencia de mercados emergentes como México y Turquía, en los que su negocio tiene alta presencia.
En términos financieros, el grupo vasco esperagenerar un beneficio antes de impuestos de 850 millones con la combinación de ambos negocios, ofrecer un retorno de la inversión del 20% para sus accionistas con un impacto de apenas 30 puntos básicos en capital.
Las proyecciones de la banca de inversión son más prudentes. Goldman Sachs, que en 2020 actuó de asesor de Sabadell y ahora también ha sido contratado, cifra en 820 millones el beneficio bruto esperable y espera ahorros de 575 millones.
HSBC considera "agresivas" las sinergias de 850 millones del banco por su tamaño y la decisión de mantener dos sedes operativas, una en Cataluña y otra previsiblemente en Madrid. Esa cifra representa alrededor del 39% de los costes de Sabadell, frente al 20-30% que habitual en integraciones. También limita al 3% el crecimiento esperable del beneficio por acción (BPA) y augura un mayor coste en capital, aunque defiende la "incontestable" lógica industrial de la transacción.
La oferta es un 14% inferior al valor en libros
La oferta que ha hecho BBVA por Banco Sabadell y que valora la entidad de origen catalán en algo más de 12.200 millones de euros es un 14% inferior al valor en libros del banco que, de acuerdo con el cálculo de los últimos doce meses de Bloomberg, coloca el valor en libros en los 2,62 euros por acción -el viernes cerró la jornada en 1,88 euros-.
Si se toman como referencia las perspectivas para el cierre de este ejercicio, este porcentaje incluso se ampliaría, ya que el consenso de analistas estima que el valor en libros de Sabadell acabe el año en 2,74, es decir, que la oferta se quedaría un 17% por debajo.