No corren buenos tiempos para la ex de Pedro J. Ramírez. La diseñadora, de 63 años, acaba de poner en venta su fabuloso ático en el centro de Madrid, por el que pide la friolera de siete millones de euros. La casa, en la que vivió sus mejores años con el padre de sus dos hijos, Tristán y Cósima, tiene más de 500 metros cuadrados repartidos en un gran salón, cocina, seis dormitorios, siete baños y una biblioteca, entre otras estancias. La marquesa de Castelldosríus afirma que se le ha quedado grande ahora que vive sola, pero la realidad es que su empresa atraviesa un momento muy delicado.