Es el cantante más popular de la Comunidad Valenciana, pero el cariño y el apego del público no se corresponde con lo que le está ocurriendo con algunos de los políticos de su tierra. Francisco, de 64 años, reconoce que ha recibido ofertas para presentarse a las elecciones municipales: "Y las he rechazado, porque soy demasiado visceral y canto las cuarenta a cualquiera, estaría de conflicto en conflicto y no me sale rentable", se queja airadamente. Y habla del trato que recibe por parte de los políticos de Compromís: "Porque, entre otras cosas, han prohibido en el ayuntamiento de Valencia que se ponga el himno cantado por mí. Y también en la Generalitat. Estoy muy quemado con esta gente. Y con tanto politiqueo. No quiero saber nada de ellos".