Tras cerrar el 40%
La banca española ha dejado de reinar en Europa en cuanto al número de oficinas por habitante, algo de lo hacía gala cada vez que podía. El ajuste del 40% de la red ha reducido sustancialmente el volumen de sucursales por habitante, hasta el punto que Chipre ya tiene un ratio mayor al del sector en nuestro país y Francia está a punto de sobrepasarlo.