La Ley de Amnistía tuvo un lógico papel protagonista en el discurso de investidura de Pedro Sánchez, que defendío la normativa pese a la oleada de protestas en las calles por suponer un claro ataque al Estado de derecho. Pero la economía también estuvo muy presente durante la sesión al desplegar el candidato el catálogo de compromisos que plantea aprobar una vez sea investido. Entre ellos se incluye la prórroga de la rebaja del IVA de los alimentos, la gratuidad del transporte público para jóvenes y desempleados, o nuevas ayudas a los tenedores de hipotecas y al alquiler. En otras palabras, Pedro Sánchez mantendrá buena parte del escudo social desobedeciendo el consejo de la Comisión Europea o el Banco de España, que instaron al Gobierno a poner fin a las medidas antiinflación para evitar un desvío en las cuentas públicas.
