Periodista
para salir victorioso en una investidura

De las dos formulas que puede elegir Pedro Sánchez para intentar ser investido presidente, la del "billar a tres bandas" es la que más le seduce. La otra, que implicaría la abstención de los separatistas catalanes para lograr 167 votos favorables (PSOE, Podemos, IU y PNV) en segunda votación y uno menos en contra (PP, Ciudadanos, CC, Bildu) le gusta menos porque implicaría hacer alguna concesión hacia los representantes de dos partidos políticos (ERC, DiL) que quieren destruir España como nación.

El objetivo es arañar y desgastar al adversario

Si España fuera un país con una vida pública normalizada y no encanallada, esta tarde todos los grupos parlamentarios apoyarían la proposición sobre corrupción que se debate en el Congreso. La presentan PSOE, IU y Compromís y a ella se sumará Podemos con casi total seguridad. Plantea la creación de una comisión permanente para la auditoría de la calidad democrática, la lucha contra la corrupción y las reformas institucionales.

El intento de desprecio al Ejército que ha protagonizado la alcaldesa de Barcelona confirma una vez más el carácter provocador y radical de la propuesta política que defiende y personifica. Podemos, En Común y el resto de facciones recién llegadas a la vida pública española albergan a profesionales de la provocación, ahora del lado institucional y antes fuera de las instituciones.

desde Rajoy a Sánchez pasando por Iglesias y Rivera

Los tres días de discursos y debates parlamentarios se han revelado como inútiles para resolver el bloqueo político de nuestro país, y como algo más. La actual clase política, instalada en una irresponsabilidad alimentada por el espectáculo mediático, no ha dudado en trasladar a la opinión pública mensajes falsos, ajenos a la realidad y embadurnados de rechazo visceral al adversario.

Ahora que se ha votado dos veces como marca la Constitución, ahora que se ha escenificado en doble debate la crispación que anida en la vida política española, ahora que la solemne sesión de investidura se ha revelado ya como un fracaso cuando no hay acuerdo de mayoría previo, evitemos que esto se repita en el futuro.

sale reforzado en el PSOE pese al 'no'

La segunda votación de la sesión de investidura a la que se ha sometido Pedro Sánchez desde el pasado día 1 terminará previsiblemente con el rechazo general al candidato, como ya ocurrió en la primera ronda. Escuchadas las posiciones de los grupos parlamentarios y la forma con la que defendieron esas posiciones, sólo un milagro inexplicable basado en un cambio de postura digno de funámbulo podría cambiar las previsiones.

Víctor Arribas

Lo importante empieza el día 5. La investidura fallida no ha arrojado grandes sorpresas y ha respondido al guión que todos esperábamos: ni un solo voto han sumado el PSOE y Ciudadanos, todos los partidos han criticado con dureza al candidato, y éste ha cosechado el menor número de votos de cualquier aspirante a la presidencia en toda nuestra historia democrática. Además, las críticas a Mariano Rajoy han sido también generalizadas, pese a que no era quien se sometía a la investidura. Las posiciones maximalistas parecen alejar cualquier posibilidad de pacto articulado por los socialistas hacia su derecha o hacia su izquierda. Pero la gran duda es durante cuánto tiempo, de los dos meses de período legal que se abren hasta el 2 de mayo, serán esas las posiciones inamovibles de unos y otros, quiénes las mantendrán y qué exigencias imprescindibles se irán diluyendo con el paso de los días y las semanas. Ésta primera parte del partido concluirá el viernes por la noche, pero lo interesante empezará entonces.

el análisis político

El candidato socialista Pedro Sánchez ha pronunciado este martes un discurso de investidura con tres ejes fundamentales. Así ha sido su intervención.

El hombre que convertía las derrotas en victorias se somete al escrutinio del Congreso. Ha llegado el momento de la verdad para él, con los deberes hechos porque ha logrado practicamente todos los objetivos que se propuso aquella tarde de febrero en la que aceptó el encargo del Rey: ha logrado visibilidad, ocupar el centro del tablero y hacer creer a los españoles que es un líder ganador con iniciativa.

Una hora larga ha durado la comparecencia ante la opinión pública de la exalcaldesa de Valencia, acuciada por la investigación policial y judicial en torno a sus subordinados en el Ayuntamiento. Los ligeros rumores de dimisión, infundados por lo que se ve, no se han confirmado y la senadora seguirá ostentando su acta pese a que los primeros pasos para el suplicatorio parecen haberse dado ya con la decisión del juez de confirmar su condición de aforada.