Periodista
crisis migratoria

Los historiadores tendrán la última palabra, pero este cronista se aventura ya a calificar lo que está ocurriendo como el mayor éxodo humano registrado en Europa desde la Segunda Guerra Mundial. Hungría intercepta a 2.533 inmigrantes en un solo día, cifra récord.

rajoy ya ha recogido el guante

"El ordenamiento jurídico no se debe petrificar". La frase resonó en uno de los salones nobles del palacio del Congreso de los Diputados el pasado 6 de diciembre de 2015, no hace siquiera diez meses. Los oídos de Mariano Rajoy sintieron un pitido sordo que rápidamente se diluyó entre sus habituales miradas a otro lado, pero algo quedó en su disco duro interno de aquellas palabras. Quien las pronunció no fue otro que Jesús Posada, el presidente de la Cámara Baja, la más alta magistratura de nuestro país tras la Corona. No habían sido formuladas por el jefe de la oposición, tan proclive a hablar del inmovilismo de Rajoy, ni por el presidente catalán que ha emprendido una operación política ilegal e irracional atropellando las leyes si éstas antes no son modificadas a su antojo. El toque de atención lo daba el máximo representante del poder legislativo. Y el guante ha sido recogido pasado un tiempo por un presidente que ya no se niega a hablar de la reforma de la Constitución Española, de la que reconoce abiertamente en sus intervenciones estivales será el gran asunto de debate público y diálogo político en la legislatura venidera, la que está a la vuelta de la esquina y que tantas incertidumbres despierta.

El debate no tiene gran emoción porque el resultado está cantado: el Parlamento español aprueba nuestra contribución al tercer rescate de la economía griega porque los dos grandes partidos del arco político actual coinciden (que no es lo mismo que estar de acuerdo) en la necesidad de que se ayude a Grecia en su desastrosa encrucijada.

El sistema electoral vigente en España es el proporcional. Comenzaremos aclarando que ese sistema en vigor es el que debe ser aplicado y aceptado por todos los partidos políticos que se presenten a las elecciones. Por mucho que no gusten sus evidentes lagunas en la aplicación de la voluntad del pueblo al votar, por mucho que la transposición de los votos a escaños permita demasiadas veces que "el que pierda, gane", el multipartidismo proporcional es el que nos dimos los españoles en aquel momento decisivo para nuestra Historia, esa encrucijada que ahora es banalizada por quienes acaban de llegar de la nada más absoluta a la representación institucional. No tienen sentido las quejas de formaciones políticas como PP, IU o UPyD que se lamentan durante meses de los pactos de perdedores o de la aplicación de la Ley D'Hont tras haber concurrido a las urnas conociendo esas reglas y aceptándolas como todos los demás. Lo que deberían hacer es promover con seriedad una reforma legislativa, negociarla, convencer al resto del arco parlamentario de su necesidad, y cambiar así unas disposiciones que atentan contra la lógica democrática. La opción preferida por España.

VÍCTOR ARRIBAS

Las obsesiones de los nuevos gobiernos populistas o apoyados por populistas que se han constituido en municipios y comunidades autónomas van pasando de las musas al teatro. Cuando en Madrid, Barcelona, Valencia, Cádiz, Zaragoza o Santiago de Compostela, cuando en la Comunidad Valenciana, Aragón, Baleares, Extremadura o Castilla La Mancha sus regidores y presidentes se aburran de quitar efigies molestas y proponer cambios revanchistas de nomenclaturas urbanas, se supone que intentarán gobernar. Y la primera patita que han enseñado en algunos territorios es la plasmación de otra de sus obsesiones ancestrales: la liberalización de los horarios comerciales.

la Gran Coalición no parece viable pero se necesita estabilidad

Podemos se desinfla. Ciudadanos se frena en seco. Todos coinciden hoy en este análisis al observar el apoyo electoral que tendrían en este momento las dos formaciones políticas que han revolucionado el patio de la vida pública en los últimos doce meses. El bipartidismo aún no ha muerto.Pablo Iglesias cogerá hoy el CIS y le dará mil vueltas a lo que está fallando en su estrategia para haber pasado de cosechar un 23,9% de intención de voto en el mes de enero a obtener un mucho más ajustado 15,7% en julio, un porcentaje que pone al partido de los ¿ex? profesores universitarios en un lugar más acorde con su trayectoria y su oferta programática.Asaltar el cielo, ergo el poder, el objetivo que desveló Iglesias en sus meses de mayor gloria y popularidad, tiene escalones a medio construir, como la gestión municipal en los Ayuntamientos en los que se han encontrado con la representación institucional comprobando la pesadilla que es pasar de los sueños teóricos de una Arcadia feliz en la que todos seamos igual de pobres, a las realidades de firmar decretos ajustados a la legalidad y a las normativas. La primera medida que el joven político y sus colaboradores deberían acometer es frenar el ansia demagógica de sus ediles de gobierno en Cádiz, Barcelona, Madrid, Zaragoza, La Coruña... para que los españoles no vean de aquí a las generales las carencias de su programa o lo que es peor, la demoledora apisonadora de quien quiere gobernar para demostrar su antagonismo con quienes piensan diferente. Sólo así podrá frenar esta caída que el CIS revela desde hace siete meses.Hay otros factores muy interesantes en la encuesta, que deberían preocupar al populismo de izquierdas instalado en muchas casas consistoriales y en la sede central del partido que les patrocina. La Monarquía es un asunto de especial preocupación para el 0,2% de los encuestados. Los recortes preocupan al 2,9%, los desahucios son un asunto preocupante para el 2,3%, y los bancos lo son para el 1,6%.

hernández excluyó a segovia en el psm

En una tarde de calor aplastante en este ferragosto madrileño, con una fecha de calendario que invita más a la piscina y a la playa que a seguir al pie de la letra la actualidad política, y en medio de la zozobra que provoca el independentismo catalán con sus elecciones a la carta, el PSOE vuelve a hacerse un insólito harakiri que no tiene precedentes y cuyos efectos son indudablemente peores que los del problema que pretende resolver. La destitución manu militari de Antonio Miguel Carmona ha roto esa placidez que antaño tenían las vacaciones agosteñas. El afable profesor podría haber seguido como portavoz municipal socialista en Madrid el tiempo que durara el gobierno de la alcaldesa Carmena sin que eso hubiera supuesto un grave problema para el secretario general Pedro Sánchez, pese a la lejanía en las posiciones de ambos? ¿o tal vez sí? Nunca desde los tiempos de la moción de censura entre Rodríguez Sahagún y Álvarez del Manzano, ahora guillotinado al frente de IFEMA por el sobrino de la regidora, había suscitado tanta expectación todo lo que ocurre en la vida local de esta Villa. Nadie se acordaba en la política nacional de los Barranco, Herrera, Lizavetski, Sabanés? Si yo estoy equivocado y el peón de Carmona era trascendental para Sánchez, sólo es posible una explicación: que en Ferraz temieran una legislatura plagada de problemas provocados por quien apoyó, obedeciendo consignas superiores, a los radicales extremistas que gobiernan la capital del Estado. Si es así, el PSOE habría preferido extirpar ahora esa posible fuente de constantes desencuentros en un momento en el que Sánchez y Luena no quieren líos con aquellos a los que han regalado alcaldías y poder municipal a cambio de evitar que se visualice su sonoro batacazo en las urnas.

¿Acaso no es una componenda política retorcer el cuello de la legalidad administrativa?

La primera víctima de la oleada antinuclear que se ha vuelto a activar cual serpiente de verano castellano manchega, es la terminología. Cualquier término con sentido peyorativo y catastrofista es bueno para hacer referencia a la instalación que, simple y llanamente, es un almacén temporal, un Almacén Temporal Centralizado de residuos generados en la actividad de las plantas nucleares que hay en nuestro territorio, las cuales producen una parte considerable y no desdeñable de la energía que consumimos los españoles. Rajoy baraja ordenar por ley que continúen las obras en Villar de Cañas.

una pugna a cuatro resulta imprescindible

Faltan demasiadas emociones para que los partidos políticos siquiera piensen en ello, pero si yo estuviera en el pellejo de los responsables de imagen, ya empezaría a acumular dosieres y a entrevistar a especialistas.

VÍCTOR ARRIBAS

No ha hecho falta ni siquiera escucharlo. Las mismas voces de siempre, diciendo las mismas cosas de siempre. En otro día histórico para el mercado de trabajo en España, objetiva y ecuánimemente hablando. Históricos eran también, por lo negativo, aquellos meses y aquellos trimestres de 2012 y 2013, o los más lejanos tres años atrás en la primera recesión que nos sacudió en esta última década.