Correlación no implica causalidad. Vicente Nieves lleva buscando explicaciones a los movimientos de los mercados y de la economía desde la crisis financiera de 2007. Aún no tiene la respuesta.

Motosierra en mano (como se llamaba el plan económico con el que ganó las elecciones presidenciales argentinas), Javier Milei y su equipo económico han partido por la mitad una 'bomba' financiera que amenazaba con explotar más pronto que tarde. Esta brusca manera de intentar desactivar una 'bomba' ha conllevado que el Banco Central de Argentina (BCRA), institución que el nuevo presidente prometió quemar, 'rebaje' de facto los tipos de interés. Pero... ¿por qué rebajar los tipos en plena crisis inflacionista? Todo tiene su explicación.

La economía de España parece mantener el tipo en medio de la tempestad, aunque ya hay algunos signos que revelan cierto agotamiento. Mientras que buena parte de los países de la zona euro están sufriendo una intensa desaceleración del crecimiento o incluso una recesión, el PIB de España se mantiene en positivo gracias al consumo. De este modo, el PIB trimestral ha avanzado un 0,3%, mientras que el PIB interanual se ha situado en el 1,8%. Pese a todo, algunos sectores de la economía ya acumulan dos trimestres consecutivos presentando tasas de crecimiento negativas, lo que indica que hay partes de la economía (las menos ligadas al consumo) que están empezando a sufrir la desaceleración. Una España a dos velocidades.

El yacimiento Rosebank, situado en el prolífico Mar del Norte, es el mayor campo petróleo y gas no desarrollado en el Reino Unido. El pasado mes de septiembre, los reguladores británicos aprobaron que el gigante Noruego Equinor comenzase las labores de perforación para desarrollar este controvertido yacimiento. El Gobierno del Reino Unido comunicó que había otorgado que la compañía energética británica Ithaca Energy ayudaría a la firma noruega en las labores de perforación y extracción de crudo, aunque la noruega tiene la participación dominante (un 80%), frente al 20% de Ithaca Energy. Sin embargo, todos estos planes e inversiones podrían quedar suspendidos. Greenpeace Reino Unido y el grupo de activistas Uplift han presentado sendas demandas en Escocia, buscando revocar la aprobación gubernamental a la explotación de Rosebank en el Mar del Norte. Este poderoso enemigo podría retrasar o suspender la explotación de este petróleo que prometía alargar la vida 'petrolera' de Reino Unido.

La economía de España es absolutamente dependiente del petróleo que viene del exterior. Esto, sin duda, genera una vulnerabilidad importante para la economía nacional. Al no disponer apenas de yacimientos dentro del territorio nacional, se debe importar la totalidad del crudo que consume. Se estima que España importa más de un millón de barriles de crudo cada día, dado que el modelo energético del país otorga, todavía, un papel protagonista al petróleo, que representa alrededor del 40% de la energía primaria total. Por ello, la crisis que se vive a miles de kilómetros en el Mar Rojo puede acabar tocando de lleno a España a través de dos canales: la disponibilidad de importaciones de crudo y el precio de estas (el precio del barril de petróleo).

El mercado de petróleo está sufriendo un año mucho más convulso de lo que se había previsto. El incremento de la producción de crudo en América ha sorprendido a la OPEP, que se ha visto forzada a realizar más recortes de lo previsto para evitar una caída mayor del precio del crudo. Sin embargo, otro factor menos comentado está también teniendo un impacto notable en el mercado de petróleo y, probablemente, será el que marque el devenir del futuro del crudo: la demanda. El consumo de crudo ha pegado un frenazo en la parte final del año por dos factores: el parón de la economía en Europa (hay datos de consumo de combustibles que hablan del mayor descensos desde 1970) y la revolución energética que gana tracción en los países avanzados.

La Comisión Europea ha publicado este mes su informe 'mecanismo de alerta' para 2024 que, como su propio nombre indica, destaca los mercados y factores que ponen en peligro a las economías de la Unión Europea. Dentro del extenso documento merece la pena poner la atención sobre el mercado inmobiliario, al que el Ejecutivo comunitario dedica varias páginas. Los economistas de la Comisión analizan la posible sobrevaloración e infravaloración del precio de la vivienda en la UE país por país. España se encuentra entre las economías cuyo parqué inmobiliario residencial se encuentra sobrevalorado.

Hace poco más de una década, el mundo de la energía dependía casi por completo de un puñado de países situados en Oriente Medio. La gran fuente de petróleo del mundo se encontraba la rica región que forman Arabia Saudí, Emiratos Árabes Unidos, Kuwait, Irak e Irán (hoy núcleo duro de la OPEP). Aunque no hay duda de que hoy esos países siguen siendo vitales para el mercado de petróleo y la energía mundial, se ha producido un hecho que deja entrever que algo está cambiando: América, a miles de kilómetros de Oriente Medio, produce ya más petróleo y derivados que toda la OPEP junta, según se desprende del último informe de la Agencia Internacional de la Energía. Este sorpasso no es un mero dato, está teniendo consecuencias para los grandes productores de la OPEP.

Ni la guerra en Oriente Medio entre Israel y Hamás, ni la decisión de la OPEP+ (el cártel que recoge a la Organización de Países Exportadores de Petróleo y sus socios externos, como Rusia) de echar más leña al fuego con sus recortes de producción de crudo, han conseguido que el precio del oro negro repunte en el mercado. Desde que el barril Brent europeo tocase los 96,55 dólares el pasado 27 de septiembre, el precio más elevado que se ha visto en 2023, se ha abaratado un 20,45%, confirmando que el crudo se encuentra en territorio bajista, y que los esfuerzos de la OPEP+ por intentar mantener los precios elevados no están dando resultados. El acuerdo de recorte de producción que anunció el cártel el 30 de noviembre no ha servido para impulsar los precios: estos caen un 4,8% desde ese momento, hasta los 76,9 dólares en los que cotiza el Brent en la actualidad.

Nayib Bukele y El Salvador están siendo protagonistas de un auténtico milagro. Poniendo el foco en las frías estadísticas, sin entrar a valorar los métodos y políticas que han permitido esta transformación (no son pocos los que critican las controvertidas medidas adoptadas por Bukele), este país centroamericano ha pasado de ser uno de los más inseguros del mundo a convertirse en una auténtica balsa. La drástica caída de la tasa de homicidios y de la criminalidad resulta incuestionable. Sin embargo, hasta el día de hoy, el Gobierno de Nayib Bukele tenía una cuenta pendiente: la economía.

Los recortes de producción de petróleo anunciados por la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y Rusia (OPEP+) este año han sido históricos. Al millón y pico de barriles anunciado en abril (a lo que hay que sumar el millón voluntario de Arabia Saudí), el cártel ha prometido más recortes voluntarios en su última reunión. Sin embargo, contra todo pronóstico, el petróleo parece haber entrado en un mercado bajista (una caída de más del 20% desde los máximos de finales de septiembre). ¿Cómo se puede explicar tan estrepitoso fracaso de la OPEP? Hay varias razones que explican este, a priori, sinsentido.