Mª José Martínez Blázquez
En estos días de tanta volatilidad son multitud los titulares que atraen nuestra atención en busca de respuestas. Uno de los que consiguieron sacar mi mirada de los números rojos fue uno de los pocos activos que suben, el oro. El metal precioso es uno de los "activo-refugio" por antonomasia. Sin embargo, en las caídas de los mercados a finales de 2015, el oro cedió un 10%. Es en este iniciado 2016 cuando ha recuperado esta normalidad y con las correcciones de los mercados acumula rentabilidades superiores al 10%. La Real Academia de la Lengua define normal como aquello que "se halla en su estado natural". En los mercados financieros este "estado" se ha difuminado en la última década.